Abril de 2002, mes recordado con tristeza por las bajas de compatriotas que cayeron por las balas de la reacción. Así como, el golpe certero de la fascia opositora en contra del proceso bolivariano. Apenas duro 48 horas, pero fue tiempo suficiente para ver la verdadera cara de la contrarrevolución opositora. Se cumplirán este año una década de esos aciagos días, tiempo relativamente corto para olvidar esa tragedia que enluto a muchos hogares venezolanos. Hoy vemos como los mismos protagonistas de esos aborrecibles sucesos andan como si nada hubiese pasado.
Tratan de aparentar con un disimulo grosero su participación en esos actos, Nunca han pedido perdón, lo de ellos es escurrir el bulto, cuando alguien pregunta por Abril 2002, voltean, y se van silbando como si nada. Es el olvido cobarde del que teme por los hechos criminales ejecutados con saña en esa fecha. El pueblo no olvida, la memoria está fresca aún. Y como si se tratara de un thriller, el candidato actual de la reacción fue uno de sus principales protagonistas. El fascismo se desbordo en esas 48 horas, solo el pueblo y un puñado de soldados dieron al traste con el saqueo, el robo y asesinatos, que vendrían después de establecerse en el palacio y con la venia del pentágono.
Esos son días que nunca debemos olvidar, la presencia de ese recuerdo nos dará la fortaleza necesaria, para gritar a todo pulmón… NO VOLVERAN¡¡.
CAPriles fue un protagonista de los sucesos de Abril 2002 que tuvo varias pinceladas de tonos negros. Cuando de modo autoritario persiguió y encarceló a ministros y diputados, así como a dirigentes populares. La guinda de la torta la coloco al utilizar fuerzas fascistas en asedio a la embajada del hermano país cubano. Todos tenemos fresco en la memoria, cuando este agente de las transnacionales dicto órdenes para que un grupo de exaltados destruyeran vehículos, así, como, cortaran los suministros de agua y luz a lo interno de la embajada, donde había niños, niñas y personas de la tercera edad. No contento con esto, CAPriles busco una escalera y como un frenético pirata llevar a cabo el asalto final a la embajada cubana. Solo la disposición firme de los allí presente dentro de la embajada de defender con sus vidas si era necesario el sitio, dispuso a este asaltante convertido hoy en candidato presidencial de frenar el asalto y saqueo final.
El fascismo no descansa, y tampoco se transmuta, ya estamos viendo por donde vienen los tiros, el bajo perfil en las encuestas, los tiene desesperados. Lo ocurrido en Cotiza es apenas la punta del iceberg. Estos oscuros personajes solo saben hacer política de una sola manera: Golpes, Guarimbas, Asaltos, Persecuciones, Prisión, Atropellos etc.
Cuando un asesor de CAPriles pidió los números sobre una medición realizada por ellos, miro al vacío y balbució algunas palabras…. “Este carajito tendrá que buscar la escalera esa que uso para asaltar la embajada cubana para que pueda subir en las encuestas”…
A buen entendedor pocas palabras bastan…..
pedro2.patino@gmail.com
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