Para la confrontación electoral del 7-O del año pasado, asistimos a un proceso en el cual pudimos ver más o menos una campaña electoral. El más o menos estuvo visible, hasta que la derecha decidió sacar de circulación su programa neoliberal de supuesta unidad nacional.
Aunque veíamos al candidato de la derecha recorrer al país, diciendo que estaba en un sitio y realmente estaba en otro; la derecha estuvo buscando pretexto para apostar a otra cosa.
El deseo de salir de Chávez no les plasmó en un escenario deseado. Hoy, la situación es para ellos totalmente distinta y frente a esta nueva realidad, trabajan sobre nuevas condiciones y con ciertos supuestos. Apostaban por un escenario sin Chávez porque suponían que las cosas sin Chávez le serían muy fáciles y descubrieron, sucedida la desaparición física de Chávez, que el comandante le tenía aún en un mal escenario para él, una curva dura y rápida (rabo e´cochino). Chávez se les multiplicó geométricamente y los líderes de la oposición se percataron que el “Yo soy Chávez” no era una ilusión o una emoción.
Veremos a Capriles “en campaña”, diciendo que está en un sitio pero estando en otro. Esta ausencia de cultura de geográfica elemental sobre Venezuela no debe confundirnos. La derecha no realizará campaña electoral porque al igual que para el 7-O, no le es posible sacar a la luz pública su proyecto de país y porque Chávez no estando presente físicamente en el pueblo, se les ha multiplicado geométricamente.
No será este un tiempo para debatir ideas y proyectos. En algunos momentos, no tendrán otra alternativa que parecerse a Chávez, pero el tiempo que el CNE ha previsto para el debate, más el de ahorita y el pos-electoral será tomado para una intensa campaña de desestabilización, cuyo objetivo será hacernos ver, con el apoyo intenso de los medios de comunicación escritos y audiovisuales que estamos en medio de una guerra civil y en un total caos.
Por supuesto, el objetivo no sería crear una guerra civil y un caos virtual, sino que pujaran para que ese caos sea real. El concierto ya esta en sus primeras sinfonías y se percibe sus primeros tonos con las declaraciones de voceros y voceras de los EEUU y la campaña que El Nazinacional ha inaugurado a través del editorial que le dedicó a Tibisay Lucena. No es que el dueño de este medio (Nazinacional) esté molesto con Tibisay Lucena, es que un ataque de estas proporciones para el CNE tenía que hacerse a través de un aniquilamiento a una de sus figuras. La idea es trasmitir, lo más perfecto posible la sensación de una guerra y esta posibilidad, pasa por colocar objetivos y dispararle sin piedad ni compasión.
Así pues, que no esperemos una campaña electoral ni en los términos tradicionales ni bajo la condición de la polarización política. La ausencia física del Comandante les trajo Muchos Hugo Chávez Frías y no pueden con eso. Además de la multiplicación geométrica de Chávez; el tiempo a esta oposición repleta de dinosaurios y vomitando odio se le está agotando y naturalmente, se sienten fuertemente amenazados. Frente a esta real encrucijada, apostaran a todo.
Siendo este un escenario muy probable para estos días, cabe preguntarse y preguntarle a los sectores medios que han sido manipulados para que odien. ¿Apuestan ustedes a esta situación? ¿Pueden darse un retiro a Miami mientras Venezuela se acaba porque cuatro poderosos imponen un escenario así? Los poderosos y dueños del circo pueden ver desde Miami el caos que desean para el país ¿Pueden ustedes?
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