El mote de “Pimentón” en el argot popular es sinónimo de “Guiso”, de trácala, de negocio ilícito, de prebendas, corrupción etc. No es un secreto para nadie, la conducta del susodicho lechuguino a la hora de cobrar comisiones y “dadivas”, y si es en moneda de U$A mucho mejor. Sus primeros pininos en estos oficios, fue durante su campaña como diputado por el estado Zulia. Por cierto, el petimetre tendrá de zuliano lo que tengo yo de suizo. La compra de ese curul con dinero proveniente de algunas empresas privadas le otorgó el privilegio de entrar al extinto congreso nacional. Después siguió con el financiamiento de grupos “Lobbystas”, para llegar a la presidencia de la cámara de diputados. Como todos sabemos, “Lobbystas” son aquellos grupos de presión en las áreas económicas y políticas para lograr ganar adeptos y espacios para determinadas metas.
Después de estos se mandó al ruedo socio-político, es decir Alcaldía de Baruta. Una alcaldía hecha a la medida de la burguesía para que los hijos de “Papi y Mami” tengan como entretenerse jugando a ser alcaldes. Hay que recalcar que estos municipios nacieron bajo el paragua de aquello que se llamó descentralización de la IV república, que no fue más que el desmembramiento de zonas geográficas para satisfacer a los sectores burgueses y así, tuvieran sus pequeños reyezuelos mandando. En Baruta también “Pimentón” Capriles tuvo la influencia del lobby empresarial.
Transcurrieron los años sin pena ni gloria, y al Lobbysta mayor como lo son el Dto. de estado(EEUU), se le ocurrió, que un sifrino proveniente del seno de la rancia burguesía pudiese llegar a la presidencia de la república, en contraste con un hijo del pueblo como lo era y es el Presidente Hugo Chávez. Aquí si se batió el chocolate a lo que en financiamiento se refiere. A través de la embajada gringa, llovieron cantidades de miles de dólares. Todo esto con el objetivo de posicionar la imagen de “Pimentón” Radonski. Esta inmensurable cantidad de dólares sirvió para financiar el golpe de estado del 2002, el sabotaje y lockout patronal del 2002-2003, y la guarimba con paramilitares incluidos del 2003-2004. La máxima de que “Si no hay dólares no hay golpe” se cumplió a cabalidad y aquí, “Pimentón” Capriles llevaba la batuta de toda la orquesta conspirativa.
Vino la campaña presidencial, donde un torrente de billetes verdes inundo a la derecha fascista. Juan Carlos Caldera fue utilizado como chivo expiatorio, pero el jefe de todas esas acciones es “Pimentón” Capriles. Juan Carlos fue expulsado de ese antro pseudo político llamado Primero Justicia. Más atrás venia Richard “Robín Hood” Mardo, que de manera descarada “lavaba dinero” en la tintorería de la corrupción. Una vez más el jefe de la banda “Pimentón” Radonski se maneja en la sombra y deja que a unos de sus títeres lo despojen de su inmunidad parlamentaria.
Es vox populi la corrupción dentro de la Gobernación de Miranda, el tráfico de influencia, la compra de cemento y cabillas que van a parar al mercado negro de la construcción, la Legitimación de Capitales etc. La guinda de la torta, la coloca el secretario privado de “Pimentón” Radonski, un tal Oscar López Colina, que posiblemente este enconchado en el Pent-house de “Pimentón” Capriles en la ciudad de Manhattan (EEUU), uno se pregunta: ¿De dónde salió todos esos dólares para comprar ese Pent-house en New York?.
Lo cierto que mucha gente dentro de la MUD y tan bien fuera de ella se ha beneficiado de los dólares que le otorgan los grupos financieros y gobiernos hostiles a “Pimentón”. Quizás por ello, esa vil y bochornosa conducta de la “solidaridad automática”, por eso también la oposición contra la Ley Habilitante en contra de la Corrupción.
Pero la justicia tarda pero llega. Me cuentan que ese “Guiso” se está quedando seco. Los comensales no están llegando a la “Mesa”. Hay un tufillo de descomposición del caldo. Pronto habrá sorpresas.
Amanecerá y Veremos…..
Por: Pedro Patiño
Red Bolivariana
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