Vino invitado por la derecha un hombre que se ha hecho de derecha y se ha puesto al servicio de ella. Mario Vargas Llosa, no viene como escritor, sabe de sumisión (y de su misión) en la tierra de Bolívar. Vino, a los pocos días de la muerte del Gabo nuestroamericano, vino a ver si todavía se consiguen aquí mariposas amarillas. Se sorprendió al ver tantas en la más perfecta metástasis del amor que él no quiere creer, se niega a creerlo. Vino sin visitadoras en una visitaita que es desagradable para todo aquel o aquella que padezca de biofilia, por eso se entendió perfectamente con el escuálida dirigencia universitaria venezolana, su visitaita debe prestarle bastante a la salud sicosocial de Gabi Arellano por ese aislamiento que le causa el no tener amigos ni amigas en Caracas, excepto una a la que la une la oración y que le tocó vivir el más extraño de los secuestros.
Realmente no se si se enteraría Vargas Llosa que con el vino también Pantaleón. Vino a encontrase en secreto con el celestinaje tratando de hacer posible la putería de la ya degradada política oposicionista venezolana. Vino Pantaleón a “cuadrarle putas al imperio” porque a ellos tampoco les gustan las mariposas amarillas, cuando saben que donde hay muchas es que está floreciendo el amor.
Pantaleón se fue a cumplir su papel mientras el segundo nobel cretino (el primero indiscutiblemente será por siempre Obama) se fue al CEDICE, organismo de parásitos pensantes de derecha que realmente NODICE lo que debe decir.
El discurso de Vargas estuvo centrado en su lucha frontal contra lo que el llama anacronismos radicales en su archiconocida cubafobia cuestionando lo que se han dado en llamar el castrocomunismo. El señor de la ciudad y los perros volcó todas sus simpatías par los “valientes estudiantes” venezolanos que defienden en las calles a su patria…quemando sus universidades, intentando acabar con una guardería con todo y niños y pare usted de contar. Vino Vargas Llosa y se fue, sin vencer, por el contrario se terminó de dar cuenta que este pueblo de Bolivar tiene una larguirucha ganas de ser libre y de enrumbarse hacia el socialismo venciendo hasta las tentaciones que como Pantaleón anda haciendo la USAID y otras fundaciones golpistas contra la vida, contra la vida.