¡La pegamos del techo! Nos botamos votando a favor de recuperar el Esequibo. Por fin, carajo, nos pusimos de acuerdo con el acuerdo en la Asamblea Nacional. Nosotros también tenemos patria. Los chavistas creían que nos iban a joder otra vez, pero los agarramos mansitos. Cuando el Cabello pidió que levantarán las manos para ver si estaban de acuerdo con el acuerdo se asombró, porque vio aquel bosque de manos limpias al poder, arriba, "bien arriba," gritó Ismael – Talanquera- García, "para que sepan, repito, que nosotros también tenemos patria". Y por unanimidad sellamos el compromiso de luchar hasta vencer, o mejor dicho, luchar hasta que se pueda, porque esa vaina va para largo.
Que no vayan a pensar los chavistas que ahora nosotros vamos a apoyarlos en todas las vainas que propongan en la Asamblea, esa vaina que quede bien claro como el agua del Guaire. Después de esa unanimidad la gente se pregunta, si ahora votamos a favor por qué carajo nos presentamos a la Asamblea cuando el presidente Maduro dio su discurso para defender el territorio y nosotros pusimos aquellas caras de cúbito dorsal. Eso es cierto, y la gente tiene razón en preguntarse esa vaina. Lo que no sabe la gente es que en aquel momento teníamos la línea de poner esas caras para que no vaya a creer el gobierno que nosotros lo apoyamos, ahora que no estaba Maduro en la Asamblea decidimos levantar las manos, porque no es lo mismo con presidente allí que sin presidente, se ve mejor la vaina sin presidente.
Ahora quien anda saltando de alegría es el compañero William – Zigatoca Negra- Dávila. Se fue a Miraflores con una cara de felicidad que no se le veía desde el gobierno de Carlos Andrés Pérez, allá lo juramentó Maduro en la comisión para la defensa estratégica del territorio ese que estamos peleando. Hasta una foto se tomó dándole la mano a Maduro y por allí se la está enviando a todos sus familiares con una frase: "Volví a Miraflores ". Y el compañero Alfonso –chavista- Marquina está medio arrecho porque no lo metieron en la comisión después que se disparó ese discurso de "anótenme ahí que yo también tengo patria y vivamos y sigamos venciendo a la oposición, perdón, al chavismo".
El papá de Margot cuando vio que todos los compañeros levantaron la mano a favor de recuperar el territorio ese, se puso de pie, apagó el televisor y tiró el control contra la pared, y aquella vaina se volvió pérdida total. Y dijo en clara voz: "Lo que falta ahora es que manden a votar por los diputados chavistas". Se fue al cuarto y le metió aquel coñazo a la puerta tan duro, que en la Cota 905 un montón de tipos levantaron las manos y dijeron: "Nos rendimos"
- Usted abusó, sacó provecho de mí.- me canta Margot
