De todos los socialcristianos que quedan en Venezuela y que vienen de COPIE, seguramente Eduardo Fernández es el más santo, cándido y maravilloso que aún tenemos. Deberíamos ir ya recogiendo firma para declararlo primero, patrimonio viviente de Venezuela y luego, cuando cumpla su ciclo de vida que nos toca a todas y todos y que espero sean para Eduardo Fernández bien largo, podamos solicitarle al Papa del momento su beatificación o canonización o las dos cosasa a la vez. Meritos tiene, sabe mentir y eso es una gran virtud.
Cuando llegue el momento que yo posiblemente ya no esté; los venezolanos y venezolanas se pondrán de acuerdo para exaltar a este tigre al salón de la fama del Estado del Vaticano
Leer artículos de la gente de la derecha es una buena actividad o tarea. Ellos gastan tiempo en declaraciones diciendo que aman a este país y lo quieren, pero cuando deciden tomar el lápiz para escribir se zapean ellos mismos. Se les va la lengua y son tan inteligentes que ni se percatan de ello.
El 27 de noviembre, el más santo de todos los socialcristiano de Venezuela escribió un artículo sobre Macri[i]. No lo dijo así, pero en unas cuantas líneas, escribió sobre la belleza de este hombre y con todo ese palabrerío, nos intentó decir, que Macri era un peluchito. Un ejemplo de político. Faltó decir: Te envidio y te queremos Macri. Así como ese “te que queremos Carmona” que salió de los pechos de muchos demócratas venezolanos, cuando el demócrata Carmona se Coronaba.
Dijo el santísimo: Eduardo Fernández: “Es normal que haya elecciones. Es normal que gane un candidato y que el otro candidato reconozca el triunfo de su adversario”. Dijo que eso era normal. Eso lo escribió el cándido y el más santísimo de los socialcristianos que tiene Venezuela, pero se me ocurre preguntarle a este santo y a su partido que ya no tiene: ¿Han reconocido haber perdido una elección desde 1998 hacia acá? No vemos como este santo se zapea su propio cinismo e hipocresía, que no es tan natural en un santo vivo.
Hay algo que no dijo, pero si dijo. Después de colocar a Macri como un peluchito. Se le “olvido” que en la primera declaración que ofreció Macri, fue para solicitar precisamente la expulsión de Venezuela del Mercosur. No dijo nada sobre eso, pero no tenía que decirlo. Eduardo sabe y se zapea, que él y la MUD desean sacar a Venezuela del Mercosur y sacar al Mercosur de América porque su proyecto es el ALCA.
Este santísimo no leyó la comunicación que le escribió Esquivel[ii], premio Nóbel de la Paz a Macri. ¿Por qué en esta comunicación, este premio Nóbel de la paz tuvo que decirle a Macri esto? “La Argentina ha marcado caminos en la jurisprudencia nacional e internacional en materia de Memoria, Verdad y Justicia (….)[iii] A 10 años de la derrota del ALCA, Argentina no puede rifar los márgenes de soberanía ganados sometiéndose a la falsa libertad de los nuevos acuerdos de entrega pregonados, como el Tratado Trans-Pacífico o TISA. Así también en materia de endeudamiento y soberanía financiera, no es cediendo a los reclamos injustos de los fondos buitres, ni continuando de pagar deudas ilegítimas e ilegales a costa de las necesidades del pueblo, que se logrará sentar las bases de una economía fuerte y equitativa. Todo lo contrario. Ningún gobierno argentino debería asumir nuevas deudas sin revisar la legitimidad de lo que se está pagando y por fuera del control soberano”
¿Será que Adolfo Pérez Esquivel tiene memoria y el santísimo Eduardo la tiene falla? ¿Será que Pérez Esquivel sabe lo que fue la Argentina de Videla y sabe además cómo se comportó este peluchito?
No leyó santísimo y maravilloso Eduardo Fernández, la propuesta de las abuelitas de la Plaza de Mayo que se quedaron sin hijos y nietos porque este “peluchito” estaba en ese clan de desapariciones.[iv] Las abuelitas saben que tienen en la casa de gobierno a uno de los que trabajó en ese plan de desapariciones de jóvenes, cuyos niños y niñas fueron luego negociados o vendidos. Ese es el peluchito que adora el más santísimo de los socialcristianos de Venezuela. Adora a Macri y los dice muy tiernamente. No hay lugar a dudas que ese es su derecho, pero se zapea.
@La_DagaRoja
Referencias
