Por estos días, los venezolanos hemos oído o leído las amenazas de que está siendo objeto nuestro gobierno, a raíz de la juramentación de Ramos Allup como presidente de la asamblea nacional. Desde entonces, como una especie de profeta, como quien sufre alguna obsesión contra alguien, ha dado al presidente Maduro, 6 meses de vida presidencial. Esto, nadie lo puede poner en duda, debido a que fue público y notorio, el día 5 de enero del presente año.
Es mas, el día 15 de enero cuando el presidente se dirigió a la nación en su discurso anual, Ramos pretendió infligirle una especie de puñalada moral, cuando descargó, por cierto fuera de protocolo, un discurso hasta medio adulante pero venenoso con el cual pretendía ganar puntos ante una audiencia que sabía estaba en cadena nacional. Todo salía a la perfección para mostrar su show, que tuvo su efecto, porque muchas personas en la red lo bautizaron como el hombre que hacia falta en la oposición. El que se atrevió a decir, las 4 verdades al presidente.
Nuevamente, en información aparecida en Aporrea el día 23 de Enero 2016, enfila sus baterías en contra del gobierno, afirmando "(...) Tenemos que resistir, no nos podemos quebrar, no nos podemos fatigar, una lucha que tenemos que emprender en todos los frentes, frente a un gobierno que está en etapa agónica, en etapa terminal, que no se resigna a admitir lo que perfectamente sabe, que llegó a su fin, ese lapso de 17 años, ignominioso y degradante en la historia de Venezuela, en que controlaba todos los poderes públicos sin contención, en que no había equilibrio, en que no se les podía decir lo que no querían escuchar (...),
Queda claro, que Ramos es un amenazador profesional. Este discurso parece una queja en contra de los gobiernos en donde él participó. Es mas, parece un discurso pronunciado por un Chavista quejándose de los gobiernos adecos, solo que lo único que habría que cambiar del texto, seria los 17 años por 40 años. Pues, en su boca tales palabras suenan huecas.
Después de todo, lo que queda pedir al diputado Ramos, es que deje de ser un tonto útil y se de cuenta que dentro de sus atribuciones como legislador no está la de amenazar constantemente al gobierno nacional, ni a su presidente, ni a las demás instituciones. Debería más bien dedicarse a cumplir con las funciones que le imponen la constitución y las leyes.
Debería prestar más atención a la realidad nacional y olvidarse un poco del mandado que tiene que cumplir al FMI, a los empresarios de Fedecamaras, Consecomercio o Conindustria; lo primero es el país, el cual requiere de la aprobación de un Decreto de emergencia económica, con el cual se pudieran solucionar los problemas de nuestra economía. Si lo hicieran, ganarían mucho con quienes engañados votaron por ellos cuando demagógicamente ofrecieron acabar con las colas y por ende con la guerra económica.
Creo, particularmente, que de nada le va a servir al diputado, seguir utilizando los medios de comunicación para proferir sus amenazas contra el gobierno, porque mas importante que el medio de comunicación, es un pueblo arrecho al cual se le quieren negar sus derechos. De todos modos, son repudiables todas las manifestaciones de intimidación o amenazas al igual que su conducta.
