Si bien en las filas de la Oposición, como era de esperarse, no existe conciencia clara de las funestas consecuencias de su empecinado modo de estar "jugando con fuego", dentro de las filas del PSUV, desperdiciando quizás la última oportunidad que nos queda para salir vivos del peligroso atolladero en que nos encontramos, tampoco.
Contraviniendo el llamado del presidente Maduro, algunos de los que precisamente mantienen gran parte de responsabilidad sobre la actual coyuntura, ejerciendo la misma actitud e infantilismo sectario que los ha caracterizado, insisten ahora en pretender secuestrar el Congreso de la Patria.
Testimonio del poco criterio y capacidad por enrolarse en el legado de Chávez, a pesar de constatar el diario tormento y viacrucis explosivo en que se ha convertido la existencia en Venezuela, ni siquiera se percatan que serán ellos el primer objetivo de guerra de toda la barbarie y el pillaje que se viene acumulando y organizando por parte quienes, sin misericordia alguna, nuevamente han comenzado asesinar policías y Chavistas.
Serán ellos a los que principalmente se les hará pagar las "facturas" por lo mucho o poco que le hayan logrado sacar a este gobierno. No habrá distingos ni miramientos sobre si fue de manera honesta o no, todo terminará siendo botín de guerra para todos aquellos que "trabajaron" por tumbar un gobierno, para ellos, corrupto.
Bajo esa sola y exclusiva premisa se pretenderá, a toda prisa, desmontar las estructuras económicas, legales, culturales y morales que hasta la fecha, con el chavismo, se han logrado en el país. "En un gobierno corrupto todo el que se haya enriquecido es Corrupto, como ha sido a través del fraude, malhabido, por tanto, deberá estar sujeto a la confiscación"...
Será el preciso momento en que todos estos "patas negras", ya acostumbrados a la dolce vita, pagarán la osadía de haberse creído con derechos de usufructuar las mieles de un país que, antes de Chávez, se pretendía tenía dueños. La purga será tan feroz como "consensuada", no habrán organismos internacionales defendiendo Derechos Humanos ni la Propiedad de "corruptos".
Todo el que se halla enriquecido, haya apoyado o trabajado con el gobierno será pasado por las armas, o sus bienes irán hacia quienes, ya sin paciencia, reclamarán y saquearán la "gótica" de petróleo que les fue negada y arrebatada. Las Cooperativas, esas formas como algunos se hicieron ricos a cuenta de no pagar impuestos y explotar a los trabajadores, serán las primeras de una larga lista.
La hoguera de esta cacería de brujas ya se encuentra encendida. Mientras tanto el aquelarre, sumamente concentrado en la lujuria de su festín, continúa cerrando las puertas de lo que cree es del Congreso de la Patria, cuando en realidad es la de su propio y frío "ataúd" .
