Interpretada por María Victoria y Antonio Badú, fue canción famosa en los 60 del Siglo XX, cuya letra cabe hoy para desnudar la actitud socarrona de diputados y otros dirigentes del bloque opositor, quienes culpabilizan al gobierno por el desabastecimiento de medicinas y alimentos, que ellos han prohijado. Muestran alegría cuando baja el precio del barril petrolero, sufrimos sequías, o las perversas alzas artificiosas del MUDdólar today, miamero-cucuteño, que entorpece nuestra economía. Jamás condenan nada de lo dictaminado contra Venezuela desde el exterior, porque le sacan punta politiquera a las colas provocadas, y las fallas de la revolución con el desgaste de poder. FEDECAMARAS y grupos industriales gozan disminuyendo la eficacia de sus plantas, con propósitos desestabilizadores, criminales en Alimentos POLAR y la Maizina Americana, donde los millonarios Mendoza y Alfonzo admiten que bajaron líneas de producción, aduciendo falsamente ausencia de divisas, todo un "sacrificio", por el cual tienen "pérdidas".
Ese sector no pudo expulsar a Chávez, celebró su muerte, y desde Abril 2013 ahogan con malas artes la gestión de Nicolás Maduro. Tienen su himno en el tema "Hipócrita", otrora dedicado al amor, pero hoy letra que puede aplicársele a la amargura de quienes cual hiedra fatal, emponzoñan su comportamiento, molestos porque antes disponían del presupuesto público, por encima de disimulócratas Presidentes adecos y copeyecos. Fueron el verdadero poder detrás del trono en la supuesta "democracia", hasta 1999, incrustados como lo están hoy en el Poder Legislativo disfrutando el erario de venezolanos y venezolanas, y aprobando leyes contra el sector mayoritario de menores recursos. Observen que procuran sabotear el diálogo, escondiendo noticias del desastre que viven Brasil, Argentina y Paraguay, en gobiernos de la ultra derecha fascista. En definitiva, "SENCILLAMENTE HIPOCRITAS".