La aversión que sentía la oposición por Dudamel, hoy no debe ser la misma. Congratulado con ella, decide salir de su dizque "neutralidad", aunque se duda de tal condición, si no supiéramos que alrededor de la revolución, pululan muchos que esconden su ideología política, mientras están consiguiendo y recibiendo; permaneciendo en un silencio obligado por las circunstancias. Solo caras vemos, corazones, no sabemos. De tal manera que, Dudamel, levantó su voz en contra de la violencia y la represión, exigiendo al Presidente Nicolás Maduro y al gobierno nacional a que "rectifiquen" y escuchen la voz del pueblo.
Hoy alza su voz de protesta, se deja ver su corazón, la política lo ha tocado, mira hacia un solo lado, hacia el mismo que se encargó de criticarlo y de odiarlo solo porque no manifestaba su posición ante lo que sucedía en el país. Se reivindica, se le ocurre ejercer su derecho de opinar en un momento en que el país arde, antes no lo hizo. ¡Que oportuno! "Tanto va la batuta al aire hasta que se rompe"
De Dudamel, se puede afirmar que, nunca fijo posiciones en torno al chavismo, ni alabó el poder constituido, ni juró fidelidad a la revolución; si a esto se le agrega que era blanco de la oposición, entonces teníamos un Dudamel neutral. Sin embargo, como venezolano, tiene sus derechos a opinar de cualquier problema nacional, aun cuando conserve fidelidad a su arte, a su música. Pero, la política, afloró en su discurso reciente. Ahora tenemos un Dudamel que no solo dirige, sino que también es capaz de levantar su voz hacia un solo lado y dejar sobreentendido que Maduro debe irse para que cese la anarquía creada por la oposición, desde hace tiempo. "A buen músico entendedor pocos, Do re mi... bastan"
Dudamel, es el protagonista mundial, como dicen los mexicanos, de un "chispoteo" en tiempos de crisis; la oposición celebra: "el hombre habló de política" Puso la batuta a un lado, momentáneamente, y se reveló como político. Arte y política van juntas. Ya no será vilipendiado por la oposición. Habrá que ver cómo se desarrollan los acontecimientos. Si alguna vez estuvo en la mira de la oposición como blanco de violencia, cuando ya no tuvieran en quien descargar sus frustraciones por no poder derrocar al gobierno, ya no será posible, pues debe quedarse tranquilo, lo que dijo es suficiente para entender que su opinión trascenderá las redes sociales y el odio que se le había manifestado por tal vía, debe revertirse en amor.
De hecho, la opinión de Dudamel se da en el peor momento, en el que Venezuela necesita música de paz, la que él sabe interpretar y dirigir, ¿Por qué no siguió neutral?; ¿Quién le escribió esas notas? ¿Por qué no pospuso su actuación? ¿Quién le mandó a echarle leña al fuego? ¿La Mud?
