En éstos momentos de locura política, en donde La MUD, anda buscando por "cualquier vía" asaltar el poder ejecutivo nacional, mantiene un doble discurso, con respecto a que por un lado, sólo quiere salidas electorales y pacíficas, pero tampoco rechaza de manera clara, precisa y contundente los actos de violencia y vandalismo, ante lo cual, no se pronuncian y hacen un silencio sospechoso...y ahora quieren aparecer como los defensores de " la constitución y las leyes", pero la realidad política dice todo lo contrario, y aqui van algunos pequeños ejemplos:
Los llamados a la calle y a la desobediencia civil por parte de los sectores más radicalizados de la oposición política venezolana, que se caracterizan por autocalificarlas como "pacíficas", pero su pequeña vanguardia son personas encapuchadas que tapan sus rostros para actuar con libre impunidad y todo lo que dicen antes y durante su "terrorismo de calle" se parece mucho a "propaganda de guerra", lo cual se presenta como una conducta anti-jurídica, ya que nuestra constitución de la República Bolivariana de Venezuela en su artículo 57 , expresa: "No se permite el anonimato, ni la propaganda de guerra...por lo tanto hay que preguntarse: ¿quien anda violando la CRVB?.
Igualmente está ocurriendo con los mal llamados trancazos o plantones, ¿Que dice el artículo 50 de la CRBV? "Toda persona puede transitar libremente..."lo cual hay una premisa jurídica: tus derechos, dejarán de ser derechos, cuando le quitas el derecho a las demás personas, eso significa que cada vez que cierran una calle o una autopista, le están cercenando el derecho al libre transito que tienen las personas.
Otro ejemplo y muy lamentable es la forma y manera en que el escualidismo tratan a la bandera nacional en sus manifestaciones callejeras, lo cual es junto al himno nacional y nuestro escudo de armas, los simbolos de la patria y en el artículo 8 de la CRBV, establece que la bandera nacional son los colores amarillo, azul y rojo...en ese orden y no como lo realiza la derecha política venezolana al colocarla al revés y con siete estrellas, violentando lo señalado en el artículo 3 de la ley de bandera nacional, himno nacional y escudo de armas de la república bolivariana de venezuela, que establece como parte constitutiva de la bandera nacional, las ocho estrellas blancas de cinco puntas, y el color amarillo va en la parte superior de la bandera, y en su artículo 1, se refiere a que nuestra bandera nacional debe ser venerada y respetada.
Todos los ejemplos señalados anteriormente son evidencias contundentes de como el sector político opositor, constantemente en sus actuaciones violentas, se encuentran al margen de la constitucionalidad venezolana.