Manuel Rosales me recuerda al tristemente célebre Dr. Smith de “Perdidos en el Espacio”. Yo, hasta sentiría pena por él, si no fuera tan infame, pero es que el hombre es tan patético, que todavía estoy tratando de entender a las personas que lo acompañan en sus actos proselitistas, es tan visceral el odio que mueve a esta gente hacia el comandante Chávez, que son capaces de seguir a este pobre hombre, que ni siquiera tiene la capacidad para hilar una cantidad razonable de idioteces que le permita mantener un discurso, siquiera de media hora. A quién se le puede ocurrir que este deficiente mental pueda sostener un debate con el Presidente Hugo Chávez, tendría que ser alguien como se dice ahora por allí, que tenga conectado el intestino grueso con el cerebro.
El tipo se parece tanto al Dr. Smith; yo recuerdo muy bien la conducta de este personaje, cometía cualquier cantidad de desatinos y después las negaba olímpicamente (tal cual como diría la rata de Teodoro) igual que Manuel Rosales y lo peor no es eso, sino que hay que ver la cantidad de imbéciles, que conforman su comando de campaña, tratando de explicar sus bestialidades, gente como Leopoldo López o el uní cejo de Borges o el mismo Teodoro o el idiota ese de Carrasquero.
¿Hasta donde puede llegar el cinismo de una persona?. Afortunadamente estamos llegando al llegadero, solo faltan horas para la paliza que va a recibir este proyecto de hombre, creo que tiene una oportunidad histórica de asumir una postura digna, solo tiene que reconocer su derrota y ocupará un sitio en la historia, de lo contrario, será revocado de la gobernación del Zulia, quizás se le siga un juicio por las cosas que han trascendido a la opinión pública, acerca de sus manejos de los recursos de la gobernación y se convertirá en poco tiempo y no “Nuevo Tiempo” en polvo cósmico. ¡OH! ¡Cielos que pena!