El Alcalde Barreto invierte miles de millones de bolívares en publicidad en los medios de comunicación, impresos y audiovisuales, que atacan a Gobierno Bolivariano con mayor ferocidad. Basta ver los cuerpos que han aparecido en El Nacional, el financiamiento al programa de radio de Melo y Semtei, etc. para ver como se ha dirigido la inversión publicitaria de la Alcaldía Mayor. Con esa actitud colaboracionista, el Alcalde Barreto pensó que compraría el buen trato de parte esos medios y de sus consumidores.
El sábado pasado, los escuálidos le demostraron a Barreto que no importa cuanto él se esfuerce por congraciarse con ellos, le darán un buen trato y lo aceptarán con respeto. El canal de televisión que dirige su amigo Federico Ravell, así lo llamó el mismo Alcalde, le dedicó todo el sábado y parte del domingo a una campaña de desprestigio del Alcalde. Usó las imágenes de un incidente en el estadio de fútbol de la UCV para demostrar la manera agresiva como este gobierno trata a los ciudadanos y como triunfa la resistencia pacífica de los ciudadanos ante los abusos del régimen. Igual trato le da su amigo “bobolongo” en El Nacional, periódico al que Barreto ha transferido grandes cantidades de dinero público, en forma de pagos publicitarios.
El incidente en el estadio demostró la verdadera cara de la oposición, y nos demostró a todos que el colaboracionismo no tiene futuro. Nos mostró que por esa vía enterraremos la revolución. El argumento de Barreto de exigir respeto y buen trato porque él financió una buena parte de la remodelación del estadio de fútbol de la UCV no funciona en la práctica. Eso a los escuálidos no le importa, lo que le importa es que Chávez salga del poder a toda costa. La voluntad y conciencia de los escuálidos no la va a comprar Barreto invirtiendo en los medios de comunicación oposicionistas. Barreto ya viste como te pagan tus amigos.
