Lo voy a decir: Cynthia Machado Zuloaga es la mujer más linda de toda Caracas. Cuando sonríe es un espectáculo y un homenaje a la belleza. Es natural, espontánea, libre y plena de ternura.
Verla de cerca es comprobar que la vida tiene sentido. Y hoy vino con ganas de hablar: -Ahora sí es verdad que nuestra gente en la oposición perdió los papeles. Estas elecciones del partido ese que ni sé cómo lo llaman los tiene locos.
Mi padre dice que es muy difícil que exista en otro país una oposición tan mediocre como la nuestra. Y lo peor, hay gente por allí que se las da de sicólogos y no saben explicar nada porque no reconocen nada. La tristeza es lo que existe en esa gente. Ninguno sonríe. Uno ve a Liliana y está siempre molesta, como que estuviera escuchando a Rosales. Julio Borges no se ríe. Leopoldo intenta, pero sabe que está inhabilitado.
Y no saben cómo reponerse.
Henry Ramos es el único que medio se ríe. Ayer estuvo en mi casa y cuando mi papi le dijo: "¿Vienes a buscar dinero?", él contestó: "Con mi democracia no te metas, Dr. Zuloaga".
El mesonero se acerca y le destapa la botellita de agua Evian y por poco se la coloca en la boca. Ella se da cuenta y se lo impide. Ella le dice que se está propasando y que tenga cuidado porque a lo mejor es la primera vez que un marginal como él se acerca a una mujer importante como ella.
El mesonero pide disculpas y coloca mi café negro sobre la mesa. Luego se marcha cabizbajo, hablando solo. Sólo se escucha un murmullo: "Qué mujer, Dios mío, qué mujer".
Cynthia levanta la botella de agua y toma directamente. Al verla así, tomando agua, parece un afiche publicitario: -Ahora no saben qué hacer. Globoravel manda más que cualquier líder de la oposición. Ni Rosales, ni un tal Barbosa, un adeco viejo que apareció otra vez, tiene poder. Fíjate que ya Globoravel impuso a Liliana como candidata a alcalde en Chacao, mientras que Leopoldo apoya a Graterón. No, amigo, la oposición es una duda y el país me duele como una muela.
Mueve la cabeza y su cabellera se enciende con los rayos del sol del mediodía. Después se toca los labios como buscando más argumentos y sigue diciendo: -Es verdad lo que dice Henry Ramos, con mi democracia no te metas, porque ellos están todavía defendiendo esa vieja democracia representativa y no proponen nada nuevo, y además ellos saben que ese tipo de democracia, esa democracia personal, esa, no volverá, amigo.
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