La expulsión del Nuncio y la participación política de la Conferencia Episcopal Venezolana

Cuando fue intolerable la participación o mejor dicho después de haberse inmiscuido en la vida política de la REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA el embajador de Estados Unidos, pues fue expulsado con justificada razón. Se demostró y defendió la soberanía nacional.

Otro tanto se debe hacer con el Nuncio Apostólico, dado que la Conferencia Episcopal se ha convertido en un partido político de extrema derecha, no le queda otra salida al Estado, digo Estado y no gobierno, por que la intromisión, la participación, de la iglesia es muy marcada, sucia, socarrona, mal intencionada, nefasta, mentirosa, y cuanto adjetivo calificativo se le ocurra al lector usar: $%&…etc.

Desde el mismo momento en que el COMANDANTE PRESIDENTE HUGO CHAVEZ habló de REVOLUCION los ensotanados pusieron el grito histérico en el cielo y en el infierno, arengaron a los feligreses contra el PROCESO, y contra todo lo que significara ROJO ROJITO.

Estos vestidos de negro, que esconden sus pecados bajo la sotana, no tienen autoridad moral para criticar las misiones, la salud gratis, la educación gratuita y obligatoria, los mercales, y todos los beneficios que hoy tiene Juan Bimba y Pedro Pueblo. La “caridad cristiana“ de la que alardean nunca, véase bien nunca ha operado gratis a miles de cataratas, por solo mencionar un servicio del proceso al pueblo. Tampoco se ha sabido de un alfabetizado no alienado, o abusado, o no explotado por los misioneros. De sus escuelas salen niños adoctrinados en el odio a la “izquierda “ convencidos en que deben dejarse explotar por el dueño de los medios de producción, y temerosos de ese dios (se señor corrector, en minúsculas) que permite la pedofilia, la buena vida de sus gordos jerarcas, recordemos que las mejores viandas se denominan “BOCCATO DI CARDENALE “ creo que no hay que traducir.

Ese dios que ellos pregonan permite la pobreza, la miseria, el dolor, y los gordos cardenales despotrican contra la solidaridad socialista. No se puede esperar nada bueno de esos tipos.

Ya es hora de expulsar al nuncio, ese criminal que no solo representa a la iglesia, protege desde hace más de un año a un criminal común en la sede de la nunciatura. Ese sujeto permite que el cardenal y los obispos arremetan contra el estado, sus instituciones, el tren ejecutivo, y hasta el COMANDANTE PRESIDENTE.

Se debe prohibir la participación en política a todos los curas del rango que sean y expulsar al nuncio como primera medida. La PATRIA no perderá nada de nada si rompe relaciones diplomáticas con esa caricatura de estado que es el Vaticano. La iglesia católica debe entender que somos un estado soberano, libre y seglar.

PATRIA SOCIALISMO O MUERTE VENCEREMOS
EN LA REVOLUCION TODO FUERA NADA

cmaglione@cantv.net


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Carlo Maglione


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