Es un status de permanencia temporal en Estados Unidos, cuyas siglas en ingles son DED (Deferred Enforced Departure). Esta condición de protección migratoria está siendo solicitada desesperadamente por los autodenominados “Exiliados” o gusanos mayameros, que alegan en sus suplicas ante las autoridades norteamericanas no poder regresar a Venezuela por temor a represalias políticas del régimen de Hugo Chávez.
Estos paladines de la deshonra nacional se la mantienen apostados en las cercanías de la Casa Blanca con pancartas y petitorios alusivos a una extensión de su denigrante estadía en la tierra del Tío Sam, casualmente a pocos días de la toma de posesión de Barack Obama. Aunque la anhelada permanencia y aprobación del termino “Exiliado”, les ha sido reiteradamente rechazado.
A estos pitiyanquitos se les ha venido el mundo encima, porque cuando picaron cabos, unas oleadas en el 2002 y otras después, no contaban con el vuelco dramático que diera la economía global y en particular la norteamericana, donde mas de un inmigrante ha tenido que retornar derrotado a su país de origen para no entrar en las estadísticas de la de los desempleados o mas aún, la indigencia.
El gringo, se va a ver en la necesidad de retomar los subempleos que rechazaban por sucios o mediocres, tales como: Limpiadores de ventanas, de cañerías, chimeneas, de automóviles, mesoneros, fontaneros, albañiles, verduleros, carretilleros, panaderos, moderadores de televisión basura, periodistas palangristas, etc. etc.
No nos extrañemos entonces si por casualidad volvemos a ver en la tierra de Bolívar, a próceres como: Orlando Urdaneta y su mira telescópica, Patricia Poleo y su periodismo basura, Napoleón Bravo y su sonrisita burlona, algunos de los monsters del petróleo, tales como, Eddie Ramírez y su palito, Juan Fernández y su reporte, Horacio Medina y otros. Igualmente los cabeza de Federal, González González, el soldadito de plomo, Guaicaipuro Lameda, cabeza e yema y el Alferito de pacotilla.
Ya he visto por estos lares, uno que otro artista en decadencia, como Carlos Mata, que despotrican de su país en el exterior y se jacta de que todos sus hijos son nacidos en otras latitudes como España y EE.UU. y se le ilumina el rostro de orgullo al contarlo. Pobre.......
Sigan pues, buscando su sueño americano y no desamparen el jardín de las rosas de la Casa Blanca, porque en cualquier momento Obama aparecerá para atenderlos y olvídense de George, porque hace rato dejó el pelero, por la puerta de atrás………
Patria, Socialismo o Muerte………Venceremos
eliasmar@cantv.net