Son muchas las quejas del Pueblo sobre el comportamiento de algunos dirigentes y funcionarios locales, regionales y nacionales, que desatienden su gestión. No son todos, ni siquiera la mayoría, pero una cantidad notoria.
Analizando algunos casos concretos y atando cabos (haciendo uso de la inducción) puede identificarse una de sus causas: un grupo de representantes del "capitalismo revolucionario" que se han posicionado en cargos que no están dispuestos a sacrificar. Para ellos, el avanzar del proceso revolucionario atenta contra los privilegios obtenidos. Han construido redes de complicidad, de negocios, de solidaridad mutua, de blindaje recíproco, a tal punto, que logran en muchos casos hacer inaccesible para el Pueblo al Presidente Chávez.
Coincide este grupo con el de los atrasados ideológicamente, del socialismo estatista, centralizador, que no han entendido el nuevo paradigma del Socialismo del Siglo 21, comunitario, descentralizador, que cree en el Pueblo. Por razones prácticas no les conviene ese socialismo. Por corruptos se han convertido en contrarrevolucionarios. Además, aún hay en el gobierno muchos contrarrevolucionarios por ideología.
El Presidente parece haber entendido ampliamente esto. Su amor profundo al Pueblo lo ha hecho buscarlo por muchas vías y, gracias a Dios, siempre sabe encontrarlo con su humildad. Dios nos lo guarde. Sus primeros acercamientos fueron de arriba hacia abajo (Polo Patriótico, MBR-200 / Círculos Patrióticos, Comando Político de la Revolución, Frente Nacional, Comando Maisanta, Comando Miranda). Pero mientras tanto intenta conformar un movimiento popular (Misiones organizadas, Comités de Salud, Tierra, etc., Mesas de Agua, Consejos Comunales, etc. en el que Chávez tiene apostado el futuro.
Como dice Istvan Meszaros, lo político tiende a suplantar a lo social y a ahogarlo superponiendo sus propios intereses. La intención del Presidente es restituir al Pueblo sus poderes usurpados. Por eso decimos, contra el Chavismo sin Chávez, Pueblo con Chávez.
