La Universidad Experimental de la Seguridad (UNES), tiene un Centro de Formación en el Estado Anzoátegui, CUYO OBJETIVO, es egresar a los futuros funcionarios de la recién creada Policía Nacional. Inteligente iniciativa del Presidente Chávez para darle respuesta al problema de la inseguridad, que estamos confrontando todos los venezolanos. El Presidente sabe que, sin una policía profesional con solida formación técnica y ética es imposible tener éxito en esta guerra contra la delincuencia organizada y la cual tiene su origen en la desigualdad e injusticia social que históricamente ha vivido nuestra sociedad.
Ya por experiencia sabemos que toda iniciativa, programa o institución que hemos creado durante los 14 años de revolución nace contaminada. Y esto sucede porque hemos tenido que utilizar los recursos humanos, técnicos y financieros que vienen con el lastre ético heredado de la IV República y además con sus valores culturales. Así que no nos puede sorprender que la novísima Policial Nacional tenga en su partida de nacimiento a padres que vienen de una larga trayectoria profesional la cual viene contaminada con los vicios normales de estas instituciones, como son el nepotismo, el abuso de autoridad y la corrupción en todas sus manifestaciones.
“La Universidad avanza hacia la configuración de una nueva moral en el área de la seguridad….”nuestro método garantiza que la policía use la fuerza sin hacer uso de la violencia porque es inmoral. No puede haber un abuso de la fuerza física porque es inconstitucional. De lo contario atentaría contra el Estado de Derecho”.
El texto encomillado es extraído de las declaraciones de la rectora de la UNES al diario Correo del Orinoco del 23/11/2002.Pag. 5, en donde informa que el “60% de los policías asesinados en las últimas semanas no estaban en servicio”. Dijo que “los problemas personales, las venganzas, que en el argot común se conocen como culebras, terminan en el asesinato”.
Hago esta introducción y coloco estas citas, para fundamentar las denuncias escritas que he recibido sobre las conductas de algunos funcionarios, que tienen la misión de administrar y facilitar la formación a los jóvenes que se están preparando para el ejercicio policial en ese núcleo de la UNES del Estado Anzoátegui.
Es ilógico pretender obtener resultados diferentes si usamos los mismos métodos, los mismos procedimientos y los mismos recursos. De allí que sólo espero que este modesto escrito sea un llamado de atención a las autoridades nacionales de la UNES para que realicen una supervisión al funcionamiento y practica de este núcleo en la metodología de formación de los futuros policías y así evitar que una “culebra” que allí se está incubando se convierta en un “asesinato” mas, de la larga lista de los ocurridos en el país dentro de los diferentes cuerpos policiales.
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