Por fin llegó Diosdado Cabello, a componer lo que echó a perder María Machado. A darle de patadas a los perversos demonios que mantenían secuestrado a Ciudad Guayana. La guerrera de la burgue estuvo en Guayana recientemente. Vino con Andrés Velásquez y su combo. Se reunió con un grupo de mafiosos enquistados en el sindicalismo de Sidor. Y dejó explícitas instrucciones sobre la guarimba sidorista, que sembró de violencia a Ciudad Guayana en estos últimos días.
En efecto, la población fue sometida a trancas de calles. Bloqueo de los puentes que comunican a Puerto Ordaz con San Félix. Bloqueo del autopista Ciudad Bolívar-Puerto Ordaz. Consecuencias: escasez de gasolina, con motivo de no dejaban pasar las gandolas. Escasez de alimentos, por lo mismo. Dificultad para llegar a los hospitales y clínicas. Dificultad para que los muchachos asistieran a clase. Dificultad para los taxis y los autobuses. Dificultad para adquirir los alimentos en los supermercados, etcétera.
Por fin, después de varios días de caos, y meses de paros, protestas y paros, se hizo presente Diosdado Cabello, presidiendo una Comisión especial, en nombre del Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, para ponerle un parado al caos que han creado un grupo de trabajadores de Sidor, manipulados por una mafia sindical. El Gobernador Francisco Rangel Gómez y el general Vladimir Padrino López, acompañaron al presidente de la Asamblea Nacional.
Los habitantes de Ciudad Guayana, estaban indignados, estresados y arrechos, por la violencia sembrada en la ciudad. Mientras la empresa Sidor está produciendo al estilo morrocoy. El gobierno tardó en reaccionar. Pero con la presencia del dirigente duro del chavismo, esperamos todos que se termine esta vaina. Que se discuta el contrato. Y que se pongan a producir. Nunca estas mafias se atrevieron a parar a Sidor, cuando estaba en manos privadas. Ahora lo hacen, cuando la empresa fue rescatada por el Estado. La avaricia por el dinero fácil, se apoderan de algunos trabajadores, azuzados por un grupito que se abroga el derecho de “lideres” de los trabajadores. ¡Que se aplique la ley, en todo su rigor! Chao. ¡Volveré!
