No sé hasta qué punto es lícito que la Cúpula podrida de la iglesia venezolana, siga entrometiéndose en la política venezolana; dejando atrás los conflictos internos de la mismísima iglesia; el pueblo venezolano, hace un llamado a estos delincuentes, y les invita a recluirse en los asuntos de su exclusiva incumbencia; como también a abandonar los fastos de la política, el pueblo venezolano se ve obligado a considerar, y estar alerta, en lo que provocan algunas declaraciones, desenfundada, sencillamente como cualquier loro, repiten el discurso desgastado impuesto por el imperio norteamericano, y sus lacayos.
Hemos visto en estos días en la televisión, en los diarios golpistas venezolanos; declaraciones de personas apoyando al “cardenal” Urosa Sabino, por la invitación realizada por la Asamblea Nacional, para que aclarara algunos comentarios cobardes, malintencionados, que había emitido en contra del gobierno, en contra de nuestro comandante presidente, y en contra del mismo pueblo. Así mismo hemos visto también, declaraciones de sacerdotes; como la que realizo en el Zulia, el vicario de Machiques “Monseñor” Ramiro Díaz; quien aseguro que desde varios años ha recibido “informaciones y comentarios” por parte de las comunidades de los municipios fronterizos de Rosario y Machiques de Perijá, sobre la presencia de grupos irregulares en el país.
Camaradas, lo que le puedo decir a ustedes y a esta sátrapa, mal llamado “monseñor” que los únicos grupos irregulares en Venezuela, son ellos, la podredumbre de la iglesia venezolana, ellos son los únicos irregulares que hacen vida en la República Bolivariana de Venezuela, que en nombre de Dios, violan a niños y niñas, que en nombre de Dios, roban al pueblo venezolano, que en nombre de Dios, dan y apoyan golpe de estado, que en nombre de Dios, maltratan y vejan al pueblo. Este sátrapa también dice: que personalmente no ha visto guerrilleros en la zona, pero, si ha recibido informaciones de personas que han sido presa de secuestro; que irresponsabilidad existe por parte de este mal llamado “monseñor”, que por simples comentarios de personeros del gobierno del delincuente gobernador Pablo Pérez, se destapa a declarar cosas que nada tiene que ver con la realidad.
Por lo visto, y esto lo hemos podido averiguar, ya que se escucha en las homilías el enfado de los venezolanos, cuando repudian a los curas que, por sus actos de destabilización han llevado a la iglesia hasta un extremo que el pueblo venezolano considera impertinente. Al pueblo venezolano le parece intolerable el trato destemplado que sostiene la cúpula podrida de la Iglesia venezolana en contra del gobierno Revolucionario, en contra de nuestro comandante presidente, y en contra del mismo pueblo, la iglesia venezolana se ha convertido en el refugio permanente de una corte de miserables. Por lo visto, las normas litúrgicas vigentes en la Iglesia no se cumplen, ya que la jerarquía episcopal, se desvió del objetivo que persigue los preceptos de la iglesia católica; es por eso que el pueblo venezolano, exige a sus miembros el estricto cumplimiento de estos preceptos.
¡NO VOLVERÁN!
Patria Socialista o Muerte Venceremos
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