A las grandes conmociones que afectan la vida de los pueblos en este comienzo
del siglo XXI, ocasionada por la crisis del sistema Capitalismo dominante y los
efectos que la misma ha tenido sobre el centro neurálgico del poder hegemónico
mundial: los Estados Unidos de América, no escapan los pequeños países del
Caribe Oriental y su prolongación en la falta oriental del continente
suramericano, la mayoría de los cuales se encuentran sometidos aún, a relaciones
de subordinación colonial y neocolonial con los viejos imperios europeos y los
Estados Unidos
Fiel a las viejas tradiciones políticas heredadas de las potencias coloniales
que moldearon sus conductas políticas y edificaron sus actuales instituciones
estatales, nuestros hermanos caribeños, han manifestado su búsqueda de salidas
a la grave crisis de sus economías periféricas y dependientes, pendulando su
voluntad política entre diversas opciones que reflejan el arcoiris de propuestas
políticas de diversos y contradictorios signos que se expresan en el mosaico
electoral del Mar de los Caribeños, lo que ha dado como resultado un
“variopinto” de resultados electorales que siendo diversos, expresan el
agotamiento de algunos mandatos, el surgimiento de nuevos liderazgos, el castigo
a gobernantes ineficientes y corruptos y, la creciente presencia en el debate
político de dos corrientes históricas que expresan modelos de relaciones
internacionales regionales de signos distintos y contradictorios: el viejo
modelo colonial, neocolonial y dependiente de los imperios y, las nuevas
propuestas de integración con Soberanía, Independencia, Sesarrollo y Justicia
Social.
Mientras los pueblos del Caribe Oriental buscan desesperadamente líderes y
proyectos que los defienda de los efectos sociales perversos de la Crisis del
Capital, apoyando gobiernos de signos políticos diversos; las élites políticas,
sociales y económicas de estos países cada vez estan más conscientes que el
alineamiento y subordinación a las viejas y nuevas potencias coloniales no les
garantiza la superación de su propia crisis, dado que el interés principal de
tales potencias es el de asegurarse alianzas políticas dirigidas a bloquear los
procesos de integración entre el Caribe y América Latina, con el fin de
preservar sus hegemonías y el control de sus riquezas, sin recibir ningún tipo
de apoyo substancial para enfrentar y superar las actuales condiciones
económicas, causadas precisamente, por tales potencias.
No sorprendería entonces, que mientras Europa se cierra en la búsqueda de
soluciones urgentes a su holocáustica crisis, abandonando a su “mala suerte” a
sus antiguos espacios coloniales, estos se vean forzados, por tales
circunstancias, a desarrollar una política internacional pragmática y realista
(“realpolitick”), dirigida a establecer acuerdos e, incluso, alianzas, que los
conecten con nuevos espacios de la cooperación y de comercio internacional
favorables en términos comparativos, respecto al sostenido con la economías de
sus antiguas metrópolis.
En ese marco, pareciera especialmente importante formular una propuesta nodular
flexible, de relación en bloque entre los países MERCOSUR y sus asociados, y
la Comunidad del Caribe y Mercado Común (CARICOM) y la Organización de Estados
del Caribe Oriental, (OECO) que permita conectar, con base a los principios de
Complementación, Reconocimientos de Asimetrías, Cooperación Solidaria y Provecho
Mutuo de las Partes, que permitan relacionarse y regularse economías de diversas
dimensiones y capacidades, con poblaciones cuantitativamente distintas y
sistemas de gobiernos con signos diversos y hasta contradictorios, unidos en el
común propósito de crear entre América Latina y el Caribe un intercambio
económico, científico, tecnológico, que favorezca la sustentabilidad del
desarrollo de estos países del Caribe y pueda constituir en soporte del
proceso de integración política propuesta en la Comunidad de Estados de América
Latina y el Caribe, (CEALC), cuya Cumbre Constituyente esta prevista realizarse
el 5 de julio de 2.011, en la ciudad de Caracas, en saludo al Bicentenario de la
Independencia Latinoamericana del imperio español.