El gobierno norteamericano agrede a nuestro país y a la Revolución Bolivariana con propósitos que nuestro pueblo conoce muy bien. No se conforman con que le vendamos el petróleo. Ellos lo quieren barato y, además, quieren que quienes gobiernen estén a su plena disposición. Por eso no deja de sorprender el comportamiento de la oposición para quienes los calificativos de bajeza y ruindad les caen al pelo. ¿Cómo es eso que de una fracción de más de 60 diputados ni siquiera uno es capaz de levantar su voz de rechazo contra quienes agreden a PDVESA, compañía que explota y comercializa la principal fuente de recursos para la economía nacional?
Me atrevo a decir que esta oposición es el colmo de la entrega y el rastacuerismo. El imperio les ha callado la boca y ellos deben saber que eso tiene su costo. Oposición que vendió su alma al diablo y sin un ápice de vergüenza. Seguramente es la mejor prueba para ratificar, una vez más, a quien obedecen y aunque parezca insólito saber que tienen amos.
Como el imperio sigue enseñando sus dientes y sus macabros planes intervencionistas, no queda otra que manifestar nuestro firme propósito de estar al lado del Presidente Chávez en defensa de la soberanía nacional. ¡VENCEREMOS!
revolcones76@yahoo.com.ve