Revisar
aquella hazaña anfictiónica generada por Bolívar en una Hispanoamérica
igualmente diversa políticamente a la actual y compararla con el mismo
sueño intentado ahora por las fuerzas bolivarianas, es un rigor histórico.
A pesar de
que el encuentro que dará comienzo a la CELAC ya de por si se
diferencia del Congreso de Panamá, por la constitución dese
su convocatoria de la unión de Hispanoamérica en una comunidad, su
raíz histórica es la misma: unirse para enfrentar el dominio hegemónico
de los países dominadores. A 112 años de distancia un primer punto
a favor es la tecnología desarrollada por nuestra civilización,
cabe recordar pr ejemplo que los representantes de Estados Unidos, salieron
un mes antes para llegar al Congreso de Panamá y que uno de ellos murió
en el camino de paludismo, así que no solo la tecnología de transporte
sino la de las comunicaciones llenan de una vertiginosa capacidad de
consolidar este esfuerzo y convertirlo en un gran paso en aquel sueño
de Bolívar de constituir la gran patria continental.
Es pertinente
entonces traer a la mesa el mapa de aquella Hispanoamérica que fue
convocada al Congreso de Panamá: Bolívar presidente de la Gran Colombia
ejercía el poder desde Perú, estaba Santander como vicepresidente
en Colombia y las fuerzas de vanguardia representadas por Bolívar tenían
ya el mismo lastre de resistencia a los cambios, la derecha endógena
que vivimos hoy en nuestro proceso, finalizadas las luchas independentistas
países como Argentina y Brasil, eran afectos al esclavismo y a los
imperios emergentes, es decir Inglaterra que era la mayor potencia mundial
de la época. Por los problemas y dificultades no solo políticos sino
logísticos no asistieron todos los representantes de la región, hoy
día tenemos en Caracas a 33 presidentes presentes en la nueva convocatoria.
Revisemos rápidamente país por país del 1.826. Bolivia no asiste
por problemas circunstanciales. En Julio de ese año el Gran mariscal
Antonio José de Sucre, su presidente, aprueba el envío de los ministros
plenipotenciarios a Panamá, al disponerse a salir de viaje se enteran
que el Congreso ha comenzado y su posibilidad de asistir se ve truncada,
aun cuando Antonio José de Sucre en un afecto seguidor del sueño de
Bolívar. Brasil tenía poco interés en proyecto de Bolívar, el esclavismo
y la monarquía tenían el mando, se oponen a la idea de la confederación
y luego de dudas no asiste a Panamá, desde Colombia Santander comienza
a tomar distancia con Bolívar y apoya el Congreso con distintos interese
que enfrenta a Bolívar, es Santander quien pide que Inglaterra asista,
así como los países neutrales de la región y Bolívar se ve obligado
a aceptarlo, pero imponiéndoles la categoría de “observadores”,
Perú esta en decadencia económica, ésta situación en el país de
los grandes virreinatos de Santa y del Río de la Plata dejan a la élite
de Perú llena de resentimientos y aposición al esfuerzo libertario
de Bolívar, la presencia de los plenipotenciarios, como país convocante
pone énfasis en la creación de la ciudadanía común ,el libre comercio
entre las partes, abolición de aduanas en los comercios de la confederación,
entre otros, en el ínterin del desarrollo del Congreso el representante
de de Perú cambia posiciones y se acerca a las de Santander, México
asiste en búsqueda de beneficios y al final el Congreso es trasladado
de Panamá a México donde termina de sesionar el año siguiente,
Centroamérica asiste con mucha falta de cohesión, pues la confederación
de 1.838 se está comenzando ha desarmar, Chile se está separando de
la idea de la confederación y decide no asistir. Estas son a muy groso
modo las cosas en sus tiempos.
La agenda del
Congreso Anfictiónico promocionado por Bolívar era la siguiente:
La renovación de los tratados de unión, liga y confederación.
La publicación de un manifiesto en que se denuncia la actitud de España y el daño que ésta ha causado al nuevo mundo.
Decidir sobre el apoyo de la independencia de Cuba y Puerto Rico, asi como de las Islas canarias y Filipinas.
Celebrar tratados de comercio y de navegación entre los estados confederados.
Involucrar a Estados unidos para hacer efectiva la Doctrina Monroy en contra de las tentativas españolas de reconquistar nuestros territorios.
Organizar un cuerpo de normas de derecho internacional.
Abolir la esclavitud
en todo el territorio confederado.
Luego de
tan ejemplar esfuerzo multinacional, en esa época tan dificultosa
el proyecto de la unión y la confederación terminó en fracaso, así
como años más tarde la gran Colombia impulsada por nuestro gigante
libertador. Hoy se hace el segundo intento. El poder político que podrá
firmarse en Caracas es de contundente importancia, la presencia de todas
las naciones dentro de sus diversidades políticas y económicas no
fue capaz, como antaño de sabotear este sueño nuevamente en marcha,
la idea de la integración de nuestra gran patria, a pesar de las contradicciones
entre las situaciones políticas, pareciera que se convertirán en una
temible fuerza que hará, si triunfa, crecer a nuestra gran patria ante
el mundo.
No es poca
cosa lo que se está jugando en estos dos días, el imperio lo
sabe e igual que antaño, moverá sus piezas para tratar de desvirtuar
la idea emancipadora que lleva en su corazón. Lo que está ocurriendo
es y debe ser el clamor de los pueblos de esta patria sometida por los
depredadores imperiales durante más de cuatrocientos años, debe marcar
el comienzo de una potencia liberadora que nace en este continente siempre
repleto de magia y poder ancestral.
Viviremos y venceremos!
brachoraul@gmail.com