El relacionista público del complejo industrial, militar y comunicacional que pisotea al pueblo norteamericano y que pretende erigirse en gendarme del mundo, se quitó la máscara y apartó a un lado sus mandaderos encabezados por Jhon Kerry y salió a verter su veneno de Tío Tom contra la revolución y la República Bolivariana de Venezuela, durante su gira por los países centroamericanos; donde dicho sea de paso, salió con las tablas en la cabeza, porque hubo la valentía por parte de voceros latinos de solicitarle, que si en realidad quiere luchar contra el narcotráfico en el continente que inicie la lucha interna en su país contra el consumo, que es el mayor del mundo y que controle el contrabando de armas de todo tipo desde Estados Unidos, para las mafias del narcotráfico, en el mundo.
El señor Barack Husein Obama, un desvergonzado de siete suelas tuvo el tupé de afirmar, que cree, que el pueblo venezolano debe escoger a sus líderes en elecciones legítimas. Elecciones legítimas con un tribunal electoral, confiable como el que lo eligió a usted ¿Verdad que si señor Obama? El mismo que legitimó a George W. Bush, frente a Al Gore, que obtuvo, más votos, que su contrincante, pero que luego en un concilíabulo durante tres meses en Florida, donde el hermano de Míster Bush era gobernador, decidieron que Al Gore, había perdido. Fue tan convincente la decisión que el competidor aceptó el veredicto. Claro que esos veredictos ya sabemos que vienen acompañados de los “buenos consejos” heredados de la Ley que Al Capone imponía en Chicago en los años 30, cuando algún comerciante o industrial se negaba a aceptarle la protección interesada. Esas elecciones legítimas, son las mismas que usted y su gang de la muerte han llevado a Afganistan, Libia y a Irak ¿Verdad señor Premio Nobel de la Paz?.
Habló también el vocero del sionismo internacional, sobre la presunta ausencia de derechos humanos en Venezuela. ¿Si tanto le preocupan los derechos humanos señor Barack Husein Obama, porque no le pone fin al centro de escalofriantes torturas y de muerte, que usted y su gabinete mantienen en Guantánamo, territorio ocupado y usurpado a la hermana República de de Cuba y utilizado por su gobierno para fines criminales, donde se violentan todas las legislaciones internacionales sobre derechos humanos y se utilizan seres humanos como conejillos de indias para ensayos perversos en contra la de la humanidad?
Por si fuera poco sale también el converso Jhon Kerry, que de pacifista partidario de los Hippies en los años 70 contra la guerra de Vietnam, ahora es el peor agente de guerra sucia utilizado por el Pentágono, para sus actividades ingerencistas, llegando a la pose grosera de pedir reconteo de votos en Venezuela, porque “su gobierno desde un principio se inclinó por el candidato Capriles Radonsky”. ¿Quien rayo se cree este sujeto para estar haciendo exigencias al soberano pueblo venezolano?
Lo peor del caso es que estos intervencionista groseros, se dan el lujo de tener cipayos pagados a través de la NED y la USAID, en nuestro territorio, de cuya actividad ni siquiera disimulan, sino que como si fuese una franquicia, anuncian que tienen destinados cinco millones de dólares para continuar financiándolos.
Es decir que el gobierno norteamericano financia el terrorismo en Venezuela, contra el gobierno y el pueblo bolivariano. Habría que ver cuanto millones invirtieron en financiar la matanza del 14 de abril, cuando el cipayo, llamó a sus huestes a “drenar la arrechera” en las calles y efectivamente salieron a matar chavistas y a médicos cubanos, que a estos últimos afortunadamente no pudieron hacerles daño, gracias a la valentía del pueblo venezolano, que salió a proteger a sus internacionalistas, que han traído al país amor, solidaridad y salud.
Frente a esta situación, solicitamos de nuestro gobierno, que actúe contra quienes están sirviendo de agentes a una potencia extranjera. Ya basta de impunidad, Capriles, López y su pandilla de la MUD, junto al Alcalde Mayor del Distrito Capital, que viajó a Estados Unidos a pedir la invasión de nuestra patria, tienen que ser juzgados por traición a la patria, por homicidas y por asociación para delinquir y que se les aplique todo el peso de nuestra legislación.
A más de veinte días de la masacre ordenada por el candidato perdedor, el pueblo sigue esperando que haya justicia. Porque aplicar la ley no es persecución, sino hacer justicia, pero en cambio la lenidad y la impunidad, sería una grave traición a la memoria del Comandante eterno Hugo Rafael Chávez Frías y a este pueblo revolucionario que confía en sus lideres.
Comencemos sin demora a enjuiciar a los traidores a la patria, a los agentes venezolanos al servicio de potencias extranjeras y así estaremos cerrando el paso al terrorismo de Obama contra Venezuela.
Periodista
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