Es sistemático el mensaje del gobierno norteamericano, repetido por sus sirvientes en nuestro continente y en el resto del planeta como una forma de crear condiciones para el aislamiento de nuestro país y así evitar que la espada de Bolívar y las ideas de Chávez se consoliden en el imaginario colectivo de la tierra.

Pero la situación comienza aquí, en nuestro propio territorio, los sectores que antes de Chávez se enriquecieron con la renta petrolera, no nos perdonan que la revolución haya cambiado el sistema de distribución de la misma para beneficio de las mayorías, ya que la lógica del sistema capitalista "es la acumulación de capital económico de una minoría sobre el infortunio de las mayorías".

Con la revolución Bolivariana esta distribución equitativa de la renta nos ha permitido contar con la satisfacción de los derechos históricamente postergados de nuestro pueblo en educación, salud, vivienda, alimentación, bienes y servicios que por ser de la mejor calidad y mas económicos del planeta, son el blanco perfecto de los grupos narcoterroristas "jefeados" por el tristemente célebre ex presidente colombiano Álvaro Uribe Vélez como parte de la guerra económica alimentada con dineros provenientes del narcotráfico.

Somos una amenaza y un mal ejemplo porque nuestros pensionados son beneficiarios de sus pensiones homologadas al salario mínimo y pagadas religiosamente mientras que en el pasado eran criminalizados y atacados con ballenas anti motín; somos una amenaza y mal ejemplo porque en Venezuela la educación y salud son un derecho humano y un deber social fundamental, mientras que en Estados Unidos, Europa y todos los países que le rinden culto al capitalismo esto es un lujo que solo puede disfrutar quienes lo puedan pagar; somos una amenaza y un mal ejemplo porque la Gran Misión Vivienda ha dotado y está dotando a las familias que el sistema capitalista había condenado a vivir en ranchos porque este beneficio ya no es un negocio en nuestro país, mientras en los países desarrollados son desalojadas las familias que deben vivir en campamentos y en peores condiciones bajo puentes y a la intemperie.

Somos una amenaza y un mal ejemplo porque el petróleo y nuestras industrias básicas fueron recuperados por el gobierno revolucionario para beneficio de la mayoría del pueblo, por eso se opone la minoría que en otrora usufrutuó de nuestros recursos naturales y energéticos para satisfacer a sus amos; el imperio y sus derivados.

Somos una amenaza y un mal ejemplo y por eso desataron la peor guerra económica con la que pretenden generar descontento popular para justificar la insurrección mercenaria y apátrida que le ponga fin a la revolución.

Somos una amenaza y un mal ejemplo porque los pueblos del mundo anhelan un gobierno revolucionario que se ponga del lado del pueblo y no del lado de los dueños del capital

Somos una amenaza y un mal ejemplo porque el fracaso del sistema capitalista y la eminente caída del imperio hacen posible la construcción de un mundo mejor pregonado por nuestro máximo líder Hugo Chávez.

Somos una amenaza y un mal ejemplo porque la construcción de este proceso está subordinada a la decisión de las mayorías, porque nuestro sistema democrático es participativo y protagónico y practicamos el ejercicio del pensamiento crítico.

Somos una amenaza y un mal ejemplo porque con nuestra Constitución Bolivariana, el Golpe de Timón, Plan de la Patria y el espíritu de unidad, nos disponemos a realizar el próximo jueves el Congreso del GPP con el que vamos a revisar la política de alianza y otros temas de interés nacional como la construcción de un Socialismo Diverso, Critico, Ético y Productivo, reconociendo nuestros errores y aprendiendo de los mismos para rectificar porque nuestra revolución es perfectible.

Desde el PPT llevaremos al debate iniciativas como la necesidad de instalar un Gobierno del GPP, la propuesta de establecer el Sistema de Planificación Territorial desde los CLPP y CEPCPP para enfrentar la guerra económica y focalizar en los ámbitos locales la creación de unidades productivas.

Somos una amenaza y un mal ejemplo porque un nuevo fantasma azota al mundo, es el fantasma del Chavismo que amenaza la estabilidad del sistema capitalista y mina las bases del moribundo imperio.

Somos una amenaza y un mal ejemplo, pero no podrán con el pueblo de Bolívar y Chávez porque nuestra revolución esta blindada política e ideológicamente, porque estamos bajo la dirección suprema de Dios y Chávez.

Dios proveerá!

Viva Chávez!