1. En Madrid, un total de 19 ex presidentes de la derecha más reaccionaria y recalcitrante, de España y América Latina denunciaron la alteración democrática que sufre Venezuela y pidieron la inmediata liberación de opositores políticos (también de la derecha golpista) encarcelados, en una declaración que presentarán en vísperas de la Cumbre de las Américas. Exigen restablecer derechos fundamentales y el apoyo al pueblo venezolano de la Organización de Estados Americanos y la Organización de Naciones Unidas. También los asesinos tienen derecho de manifestarse: sólo faltaron firmar –como expresidentes- Hitler, Mussolini, Franco, Reagan, Thatcher, Bush; también Pinochet, Somoza, Stroessner, Batista, Papa Dog.

2. Entre los 19 firmantes destacan el español José María Aznar (asesino junto a Bush del pueblo de Irak), los mexicanos Vicente Fox (ladrón y corrupto) y Felipe Calderón (asesino de 100 mil mexicanos), los colombianos Álvaro Uribe y Andrés Pastrana (sustentadores del Plan Colombia y asesinos), el chileno Sebastián Piñera (pinochetista chileno), el peruano Alejandro Toledo (Indio al servicio de los millonarios peruanos), los costarricenses Laura Chinchilla y Óscar Arias (agentes del imperio yanqui), los salvadoreños Alfredo Cristiani y Armando Calderón Sol (En espera de la cárcel) y la panameña Mireya Moscoso (agente del imperio). Están juntos nuevamente para apoyarse porque en sus países los quieren, pero en la cárcel.

3. En México nos basta ver firmando a los expresidentes asesinos y saqueadores Fox y Calderón para saber quiénes son sus correligionarios firmantes. Los del PRI (los expresidentes Salinas y Zedillo) aunque son igual de funestos que los panistas, no son tan idiotas de firmar; aunque si el llamado fuera también para “intelectuales” firmarían con gusto los mexicanos: Krauze, Castañeda, Aguilar Camín, Alemán, Gómez Leyva, Televisa, seguidores de Vargas Llosa, así como mil más que viven de comisiones chupando de las ubres del presupuesto público. ¿Qué mejor oportunidad para los firmantes demostrar al presidente Obama quienes son sus fieles seguidores? Pero el pueblo venezolano seguirá defendiendo el proceso progresista que Hugo Chávez inició.

4. Sin embargo, con la reciente actitud de Obama hacia Cuba -tratando de establecer relaciones diplomáticas después de 53 años de estar rotas- parece que los yanquis pretenden cambiar de táctica y no escucharán a los gusanos expresidentes que han firmado. Pero hay que preguntarnos: ¿Qué persigue el lobo imperialista –el saqueador y asesino de los pueblos- al disfrazarse de oveja? ¿Pretende dividirlas para engullírselas de uno en uno o de plano está viendo dura la competencia con China, Rusia, India, los islámicos y no quiere perder? Tengo la convicción que Cuba, Venezuela, Bolivia, a pesar de sus profundos problemas no resueltos, no caerán en la trampa de las redes imperialistas. ¿Exigirá Correa la liberación de Assange?

5. El Presidente Juan Carlos Varela de Panamá, aunque no haya cumplido un año en el cargo, debería exigir a EEUU la reparación de daños por la ocupación del Canal de Panamá durante un siglo. ¿Cuántas riquezas atravesaron el Canal sin que el pueblo panameño haya gozado de la parte que desde hace 100 años le correspondía? Tengo confianza en que los sectores democráticos y progresistas de Panamá saldrán a la calle para exigir a Obama respeto para los procesos en Cuba y Venezuela, así como a otras políticas antimperialistas de América Latina. Parece que los candidatos sucesores de Obama en la presidencia de los EEUU pueden ser mucho más derechistas y guerreristas, es lo que se vislumbra del radicalismo de los Republicanos y Demócratas.

6. Así que los Fox, Calderón, Aznar y Uribe es el hitlerismo-pinochetismo de nuestro tiempo. Si en México se levantara una encuesta nacional sobre ellos y su comportamiento como gobierno, el 100 por ciento de la población pediría que estuvieran en la cárcel acompañados de Salinas y Zedillo. Pero México sigue siendo un país al servicio de los gobiernos, los empresarios, los medios de información y el alto clero. Obama, aunque pretenda presentarse en la Cumbre de Panamá como el restablecedor de las relaciones con Cuba y aunque pretenda decir que no agrede a Venezuela, no puede ya ser creído porque no ha dejado de ser el representante máximo del imperio y la guerra. Hay muchos problemas pendientes que reclamar por Argentina y Brasil.