Las actividades de la C.I.A., contra Venezuela y el mundo son heteróclitas. Esto significa que sus acciones irregulares, permanentes, extrañas y fuera de orden son normales. En criollo “Nunca se sabe cuando la C.I.A. bebe agua”, igual al tiburón.
Es por esa razón, que la revolución debe digerir que el enemigo es el imperialismo, su guerra mediática de mentiras y la C.I.A. su brazo ejecutor.
Cuando el líder Presidente Chávez, señala que hay una campaña de rumores en Venezuela y considera que se trata de una acción “terriblemente perjudicial, que se acerca al terrorismo”, nos esta alertando. Hoy la revolución debe fortalecer sus acciones de contra espionaje y construir los (consejos de inteligencia social), es parte de esa defensa asimétrica por la revolución. Tenemos que aprender a detectar “cuando el tiburón bebe agua”.
Nuestros cuerpos de inteligencia, heredados de la cuarta república, educados clásicamente, deben ser adaptados a la inteligencia social del socialismo del siglo 21.
Por otro lado, la Asamblea Nacional, debe ser el escenario permanente de debates, una lucha mediática debe producir un segundo debate entre actrices y actores, por la revolución Dilia Guaicarán, Simón Pestana, Carrillo, Trapiello, y por la oposición las señoras Amanda Gutiérrez, Carolina Perpetuo, Norkis Batista, etc.
La historia la escriben los vencedores, por lo tanto la C.I.A., usando la mentira como arma de guerra, muchas veces coloca su agenda, ejemplo concreto “cierre de R.C.T.V.”, cuando la revolución contraataca, es fin de la concesión, ya la C.I.A., monta guarimbas estudiantiles gritando “libertad, autonomía universitaria, si no hay libertad no hay copa América, llegaremos a la plaza Caracas, S.O.S., reconciliación”, pero ya antes, habían ensayado con las guarimbas de paramilitares disfrazados de estudiantes en Mérida. ¿Será que estas cortinas de humo, son la careta del plan “b” o golf quirúrgico de los paracos?
Simón Bolívar, el 25 de mayo de 1820, le escribía una carta a José Rafael Revenga, sobre la política internacional y en especial las relaciones con los Estados Unidos. El presidente Monroe debe reírse al ver la sencillez con que nuestro agente cree la posibilidad de una conducta insensata por parte de Inglaterra. La conducta infame, engañosa, egoísta, y tortuosa es tal de los Estados Unidos hacia nosotros. Es necesario conseguir la verdad que en política como en guerra es de un valor inestimable. Bolívar decía, no nos dejemos alucinar con apariencias vanas; sepamos bien lo que debemos hacer y lo que debemos parecer,”es necesario aprender de la escuela de Maquiavelo”.
La C.I.A., le aplicó el tratamiento Camelot (conductas violentas clonadas a la oposición venezolana), llegando al extremo de arrecharse entre ellos mismos a cada momento. La oposición esta sedienta, adicta a la mentira, y la máxima según la cual “una mentira repetida muchas veces se convierte en verdad”.
Los confidenciales de José Vicente Rangel, son mejor que una tumba con teléfono público, alerta “los paramilitares colombianos están aquí”.
Patria, Socialismo o Muerte, Venceremos !!!!!!!!!!!.
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