Frente a la visible indiferencia
de varios gobiernos de la región, el imperialismo norteamericano construye,
lentamente, un mito, que sin duda, pretende dar justificación a la
confiscación de importantes riquezas naturales en nombre de la infame
“lucha contra el terrorismo y por la libertad”.
La Triple Frontera
(territorio ubicado entre Brasil, Paraguay y Argentina)
El peligro que se cierne sobre la llamada Triple frontera, valga decirlo; territorio ubicado al Sur de la América, entre las fronteras de Brasil, Paraguay y Argentina, y que alberga en sus suelos inmensas riquezas hídricas, minerales y agrarias, ha llegado a su punto más álgido. Veamos.
En días recientes, el actual director de la Central de Inteligencia Americana CIA, El General Michael Hayden, acusó que Al-Qaeda y otros grupos islámicos preparan ataques contra Los Estados Unidos de América. Esta información resulta concatenada con otra noticia que recorrió al mundo, publicada el día 9 de mayo del presente año por www.INFOBAE.COM, y titulada: “Hezbollah planearía atentados desde la Triple Frontera”. En ella se expresa lo siguiente, “El grupo terrorista echó raíces en América del Sur, fomentando una bien financiada fuerza de radicales listos para probar su odio hacia los Estados Unidos con su muerte… Así lo señalaron oficiales militares de los Estados Unidos y diversas agencias policiales a lo largo del continente sudamericano en un informe realizado por Telemundo y NBC difundido ayer”.
De derecha a
izquierda, Michael Hayden, Bush y Negroponte
Por otra parte, además, fuentes del Pentágono y otras agencias de seguridad estadounidenses, también han venido señalando a la zona (La Triple Frontera) como “el lugar de ubicación y concentración de una numerosa colonia árabe, desde donde presuntamente fluía importante ayuda financiera hacia Al-Qaeda y otros grupos de origen árabe y de confesión islámica, calificados como terroristas”. ¡Como siempre, la excusa perfecta y necesaria!
Para nadie es un secreto
que las ansias devoradoras del capital transnacional han puesto el ojo
sobre todos los países en donde se encuentran grandes depósitos recursos
naturales fósiles y minerales fácilmente explotables y proveedoras
de jugosas ganancias para el capital. Quien desconoce la importancia
de esta zona (Triple Frontera), sólo nos bastaría con mencionar que
en dicha área se encuentra el Acuífero Guaraní – que es uno de
los reservorios de agua subterránea más grandes del mundo, encontrándosele
en el subsuelo de un área de alrededor de 1.190.000 kilómetros cuadrados
(superficie mayor que las de España, Francia y Portugal juntas)- una
de las reservas de agua potable más importantes del planeta. En esta
región también confluye el rio Paraná, sobre el que se han construido
varias represas e hidroeléctricas, la más importante de ellas: la
constituye la represa de Itaipú, una magna construcción –actualmente
la más grande del mundo- para la generación eléctrica, cuya propiedad
es Binacional (entre Brasil y Paraguay) y con una potencia instalada
de 14000 MW (megawatts), con 20 turbinas generadoras de 700 MW cada
una.
Hidroeléctrica
Itaipu, propiedad Binacional
De todo lo mencionado,
y también de sus fértiles tierras para la siembra; de sus bellos paisajes
(las cataratas de Iguazú) -impresionante atractivo, que hacen del lugar
un gran zona turística por excelencia-; de la enorme biodiversidad
que se aloja en esta región, el gran capital transnacional por medio
de su Estado imperial, pretende apoderarse. Además, su condición de
triple frontera permitiría al imperialismo norteamericano un rápido
desplazamiento de tropas de un país a otro, que serviría como una
tenaza para controlar a los pueblos rebeldes de Brasil, Argentina, Uruguay
y Paraguay que se alzarían en contra de estas groseras pretensiones.
Las cataratas
de Iguazú
Son sólo estas, y no otras, las verdaderas razones lo que motiva al imperialismo norteamericano a acometer semejante especulación. Por ello, el imperialismo norteamericano ya ha adelantado acciones en la región. El 1 de julio de 2005, se produjo el primer desembarque en Paraguay de unos 400 marines norteamericanos del Comando Sur, con inmunidad total para actuar, en marco de un acuerdo de cooperación entre el gobierno del Paraguay y los Estados Unidos de América. Con este ejército se conformó la primera base norteamericana, construida en pleno Chaco paraguayo, y que ya está preparada para albergar hasta 16.000 militares con todos los armamentos necesarios. Con este hecho se evidencia la alianza estratégica que busca EE.UU con gobiernos lacayos para garantizar el control de la región.
Es importante resaltar, que este falso e infame pretexto ha sido también empleado contra los pueblos del medio oriente (Irak, Líbano e Irán) para apoderarse de sus recursos energéticos: la supuesta presencia de "terroristas islámicos" que "atentan" contra la seguridad y los intereses norteamericanos. Hoy en día, donde quiera que se encuentre un árabe, se convierte él, sin saberlo, en un pretexto del imperio para apoderarse de las riquezas del país que lo albergue. Venezuela ha sido también víctima de semejantes desfachatadas acusaciones. Muy recientemente, fuentes del departamento de estado han venido señalando la supuesta existencia de “células terroristas” en la región oriental del país, no por casualidad es el lugar donde se alojan las reservas de petróleo más grande del planeta, cerca de 230 MMMBls. (mil millones de barriles) ubicados sólo en la Faja Petrolífera del Orinoco, que sumado a las reservas situadas en otras aéreas del país, alcanzarían los 316 MMMBls., (esto sin contar las reservas de Gas, Hierro, Oro, Diamante, etc., existentes).
Lo cierto es que, en La Triple Frontera, según datos registrados de los últimos censos, posee una población de alrededor de 470.000 habitantes, cifra que incluye a una gran comunidad árabe de unas 25.000 personas (5% de la población), tanto musulmanes como cristianos, especialmente, de árabes libaneses y palestinos que han encontrado refugio y paz en lejanas tierras, producto de las continuadas guerras promovidas por el imperio norteamericano y sus aliados sionistas en sus tierras de origen.
Los pueblos de Brasil, Paraguay y Argentina -de la misma forma que de Venezuela y en toda Latinoamérica- los han recibido como hermanos. Es apreciable la unión en la combinación y el enriquecimiento de sus culturas, así lo pudimos constatar en un reciente viaje que hicimos por la región. La gastronomía árabe se encuentra difundida como platos típicos de la región. La confraternidad es apreciable. Sólo las religiones hacen la diferencia. Los Evangélicos se pasean con carteles escritos en árabes haciendo llamados a los musulmanes a convertirse al cristianismo y propinando descalificaciones contra el Islam. Esto refleja un franca lucha y sospechosa alianza de estas iglesias con la iglesia evangélica norteamericana. Pero hasta hoy no se han producidos incidentes. Los pueblos de la región no se han dejado manipular.
Fue el Infame Karl Rowe,
ex asesor de Bush y principal estratega político de la actual administración
norteamericana, quien en una ocasión expresó alegremente al mundo
las siguientes palabras: “ahora
somos un imperio; creamos nuestra propia realidad”. Es en definitiva,
el insaciable imperialismo norteamericano el peligro en esta región
y no la comunidad árabe que reside en ella. ¡Esta guerra avisada solo
mata al ingenuo!
Bush junto a
su infame ex asesor Karl Rowe
La campaña internacional del imperio, de infamias y falsa escusas, prosigue en búsqueda de lograr sus criminales objetivos. Desde la República Bolivariana de Venezuela debemos levantar nuestra voz de protesta y denuncia en solidaridad para con estos pueblos hermanos. Urge crear conciencia sobre esta problemática.
