Fue tan contundente la victoria del Comandante en la
Cumbre de Río y tan deplorable el papel del pelele santandereano que
el propio dueño del circo tuvo que salir a realizar el trabajo sucio.
La hiena herida ataca y amenaza a Venezuela y a nuestro Presidente,
pero esto no es para tomarlo a la ligera, es necesario asumir una
posición defensiva y atender el peligro que sobre nuestra patria se
cierne. Bush ha amenazado con congelar los fondos que Venezuela tenga
en los bancos del norte y esto no es una broma pesada. El imperio
realizó esta hazaña con la Cuba socialista justo al comienzo del
bloqueo, luego vino la acción bélica y los actos de terrorismo contra
la Isla de la Dignidad.
Como medida preventiva y ante la amenaza nuestro país debe retirar
todos los fondos que posea en los estados Unidos, exigir el pago de
nuestro petróleo en euros y por adelantado (guerra avisada no mata
soldado). Luego, es absolutamente pertinente denunciar las amenazas
del Presidente del Imperio ante los organismos internacionales y
exigir un pronunciamiento oportuno tanto de la OEA como de la ONU.
Nuestra diplomacia debe moverse con prontitud y eficacia buscando el
apoyo de los países amigos y el consenso para condenar y conjurar la
amenaza imperial, la bestia herida es capaz de todo.
En lo militar es urgente movilizar a la reserva y señalar con claridad
cuales son sus tareas en caso de agresión armada, debemos prepararnos
a conciencia para enfrentar el peor de lose escenarios. Es urgente
detectar al enemigo interno aliado del estado agresor, para en caso de
invasión, anular sus acciones colaboracionistas y de traición a la
patria, con esto no se puede ser blando y permisivo.
La contrarrevolución no descansa, el objetivo es Venezuela, no es hora
de pensar en inmolaciones, hay que preparase para una respuesta
contundente en caso de invasión, el pueblo no se va a salvar porque
nos rindamos ante el enemigo, para morir desarmado como le sucedió al
pueblo chileno es preferible morir luchando. Nuestro Libertador nos
demostró que los imperios son derrotables, Viet Nam nos demostró que
por muy poderoso que sea la bestia gringa, si se lucha con denuedo y
con pasión, se le hace morder el polvo de la derrota.
¡No al sabotaje económico! ¡No a la amenaza bélica de la canalla imperial!
¡Patria Socialismo o Muerte Venceremos!
rafaelurdanet@gmail.com
