Muy recientemente tuvo lugar en la ciudad de Caracas, precisamente en el Hotel Tamanaco, una nueva convención de la “Asociación Venezolana de Procesadores de Gas”, mejor conocida por sus siglas como la “AVPG”. Muy pocos conocemos quiénes son y qué buscan estos señores que, valga decirlo, de “Venezolana” solo posee el nombre. Pero veamos.
Dicen por allí que “para criticar algo debes de conocerlo bien”; que “algunos hechos, palabras, detalles te dicen todo”; y, que “el diablo se expresa en los detalles”. Pues, aceptamos una invitación y accedimos a conocer al monstruo de cerca. Para nuestra mayor decepción, al monstruo le faltaban dientes. Ya no estaba la ExxonMobil presente, pero si sus hermanas.
Un Hotel de lujo; un brindis inicial con buen champán, y unas palabras de recepción; un ambiente agradable, con chicas modelos rubias y morenas, esbeltas; material POP, etc. Y no faltaba la intervención de un clérigo (cura) para insultar a los médicos cubanos. En fin. Todo un festín. ¡Es lo esperado de estos eventos!
Como es costumbre, se abre la convención con palabras, presentaciones de algunos representantes de los entes del Estado y las transnacionales privadas. Luego se invita a los asistentes a participar en las diferentes exposiciones realizadas por doctores, magísteres, expertos en economía y petróleo, en las diferentes salas del hotel. ¡Pasen adelante distinguidos Sres.! -Nos dijo una bella promotora.
Anecdótica pero excelente, -así nos pareció- fue una presentación realizada por el Ingeniero Jiménez, Gerente de PDVSA Gas. Una interesante exposición cargada de aspectos políticos que resaltaban las estrategias unionistas y sociales de la nueva política petrolera y gasífera del Estado en el marco del Plan Siembra Petrolera. Claro está, sin dejar de lado los aspectos técnicos necesarios ajustados a nuestra realidad política-revolucionaria.
Su intervención no provocó un solo aplauso de los “meritócratas” ingenieros y gerentes de la Total, Chevron, Repsol, entre otros, (-todos ellos, viscerales y descarados contrarrevolucionarios, agentes de las transnacionales-). Sus caras furiosas nos generaron incontenibles risas.
Pero otros, sin embargo, se esmeraron por procurar los aplausos de la canalla, dedicándose a resaltar solo aspectos técnicos de la industria del Estado y sus políticas, sin mencionar por ningún lado de sus discursos los términos: Revolución y Socialismo, pretendiendo con esto agradar al enemigo. -Se indignaría grandemente el Ministro Ramírez si se enterase de esto-.
En una charla de expertos economistas algo curioso escuchamos.
El magíster, Savati (apellido de un representante de las transnacionales), “experto” economista, nos vino con la misma receta neoliberal. Savati, junto a otros “sesudos” analistas intentaban justificar lo injustificable: como explotar, aun más, a los países "emergentes". Lo asombroso, o lo novedoso, fue la sutileza de este expositor. Nos calificó de países "emergentes", ya para ellos no somos países “subdesarrollados” o del “tercer mundo”. ¡Es un avance! –diríamos. Pero Savati es también magister en el disfraz. Con ese sutil término, hábilmente, encubrió lo que realidad somos: "Países Explotados”.
Algunas formulas nos mostró nuestro aludido. “A los revolucionarios nos gusta la matemática” –lo ha dicho en varias oportunidades el Comandante Chávez-, pero hasta el mejor matemático puro preferiría el manicomio o el suicidio ante tantas formulas, factores (β-α-℮) basados en simples especulaciones subjetivistas.
Se refirió al cálculo del CAPM (modelo para la estimación del rendimiento); a la diferencia entre el “Riesgo País” de los países emergentes y de los países desarrollados; a la Tasa de descuento del capital invertido, etc.
“En el cálculo del CAPM debería considerarse al resto de los mercados de los países emergentes".
En otras palabras, un Beta prima adicional para la formula, nos cuenta el Sr. Savati. “Un nuevo descubrimiento para celebrar”.
Intentaban, desesperadamente, justificar con especulativas formulas, y nuevos factores incorporados a ellas, las excesivas ganancias que obtienen las grandes fuentes financieras internacionales y las grandes transnacionales por invertir en los países “emergentes”. Se esmeraron en justificar el robo y el saqueo de nuestros pueblos; las ganancias abismales que obtienen estas transnacionales en comparación con la misma inversión en los países “desarrollados”. Porqué, según ellos: el Riesgo País es más bajo. Pudiéramos simplificar la formula de esta manera: ("A mayor Riesgo País, mayor es el retorno (robo) del inversionista"). Pero aquí cabe preguntamos ¿Quien define los riesgos? -por allí se escuchó la respuesta: “los mercados de capitales”. En otras palabras, son ellos mismos quienes lo definen.
Si lugar a duda, la AVPG representa el mayor Lobby de las grandes transnacionales petroleras y gasíferas. Son, en resumidas palabras, los gánsteres del gas. Sus eventos, son el lugar para la captación de cuadros de nuestra industria, a través de la seducción por el lujo y las ideas que se expresan. Allí no existe el debate.
Después de este artículo, seguro, no seremos nuevamente invitados o bienvenidos a sus festines gansteriles. Más, posiblemente amonestados por sus defensores.
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