Encallejonarnos entre la espada de McCain, y la pared de Obama. Es poner entre dicho la capacidad de los países del continente sur latino y, a la rebeldía hoy boyante en la conciencia de sus pueblos; de ser capaces de buscar sus propias alternativas de independencia. Más allá de lo que se presente en el panorama político- militar de la nación controlada por la elite sionista imperial (EEUU). La realidad histórica, demuestra con suficientes pruebas, que para el mundo da igual quien sea el que ostenta el poder en esa nación, cuando de imponer intereses y como los impone se trata. Los gobiernos bajo la batuta de cualquier de esas alternativas, no representan en verdad ninguna diferencia respecto a la aplicación de la política del garrote vil que practican.
Nuestro continente, tiene en este momento una oportunidad resaltante, para determinar su futuro mas allá de lo que se presente en el juego electoral Norteamericano. Los gestos de autodeterminación en los pueblos: Venezolano, Bolivianos, Nicaragüense, Cubano, Brasileño, Argentino, mejicano, colombiano, peruano, salvadoreño y un extenso etc. Demuestran que la disposición de caminar sin la tutela del imperio del terror; es una voluntad y decisión ya tomados, con el conocimiento de los riesgos que ello implica. Ya las amenazas del opresor yanqui, no surten el efecto de miedo que antes surtían. Las manifestaciones de dignidad, como por ejemplo el de Bolivia: donde la población indígena, autónomamente expulsó a un organismo de intervención imperial (USAID) SIN MEDIACION NI EXPLICACION A NADIE. Es un acto de soberanía popular que habla por si solo de la disposición de ser libres por todos los medio, y asumiendo lo que haya que asumir para lograrlo.
La debilidad imperial en este momento, no le permita a los controladores de la mafia del poder político- militar en USA. Jugarse las aventuras del pasado. Las experiencias de Vietnam, Irak, Afganistán, cuba, etc. Han señalado un rumbo que orienta la senda, para enfrentar al poder omnipotente de ayer del dictador mundial. Sabemos que aun disponen de parte de ese poder, pero éllos saben que sus aventuras intervencionistas les debilitan cada vez más internamente. Eso aunado a los desastrosos resultados económicos en su propio sistema, ha causado efectos muy preocupantes en sus asuntos sociales. Cada día se despierta un poco mas la preocupación de su propia población. El incremento de la pobreza, los altos índices de desempleo, los desalojos de familias de sus viviendas, por no poder pagar las expropiantes tazas de interés de los pulpos capitalistas, la incapacidad de respuesta a los cada día más continuos desastres de los fenómenos naturales, los altos costos de los combustibles, la recesión económica inocultable, que ha llegado hasta los extremos insospechados hasta hace poco, de racionar la compra de productos básicos, tales como el arroz. Y un sin fin de asuntos que pasan hasta por la violencia que se inocula en la población, manifiesta hasta en los colegios y universidades y el resurgimiento del racismo. Hacen que el panorama del imperio se le ponga más allá del tono gris.
Todo este cumulo de cosas unido: sirven de catalizador al proceso independentista del continente sur latino. La adquisición de conciencia libertaria de nuestra población, y el desprestigio de quienes le servían de instrumento de sometimiento y dominación cómplice, acabaron por derramar la copa de la paciencia, el miedo y la ignorancia.
Así que no valen ni importan los Obama, o los McCain. Ya no son determinantes en el rumbo de nuestra soberanía. Al terminar de caer los gobiernos lacayos de Colombia, Perú y Méjico, habrá finalizado su etapa anti histórica de abusos en la región.
javiermonagasmaita@yahoo.es
