Los negociadores de Primero Justicia, Un Nuevo Tiempo, Copei (ahora
Partido Popular), Globovisión y Acción Democrática (esta última
representada por Ramos Allup, Omar Barboza, Alberto Federico Ravell o
por todos a la vez), en compañía del encargado de negocios de los
Estados Unidos, se enconcharon en un discreto hotel en la isla de
Puerto Rico.
Los criollos habían viajado de manera casi clandestina ocupando
asientos en la clase de negocios, una categoría que se ubica entre la
primera clase y la turística, procurando no llamar la atención.
Poco antes lo había hecho el representante gringo, quien alegó que
asistiría a un matrimonio cuando en realidad se pensaba incorporar a
un contubernio con los miembros de la alta sociedad civil criolla.
La reunión tuvo por objeto conocer las tácticas desarrolladas en la
sala situacional de la Sección Cuba-Venezuela correspondiente a la
Agencia Central de Inteligencia. Tales procedimientos deberán
aplicarse antes y durante el venidero referendo constitucional que
tendrá lugar el 15 de febrero, de cuyo resultado dependerá que Chávez
se vaya en el 2012 o se quede en la Presidencia hasta que los nietos
de Yon Goicochea se gradúen en Yale o en Harvard.
Desde luego la voz cantante la llevó el encargado de negocios gringo
pues, en estas reuniones, el que paga puede hablar todo lo que quiera.
En este caso el representante del gobierno agonizante de George W.
Bush hizo uso del enorme poder de persuasión que se obtiene al aportar
tres millones de dólares libres del IVA y del control de Cadivi.
Para no correr riesgos los negociadores políticos decidieron no
inventar nada nuevo y atenerse a las fórmulas del viejo manual de
procedimientos que dieron sus frutos en abril de 2002. Claro está que
en aquella oportunidad algunos entrometidos bajaron de los cerros
antes de que se decretara la ley marcial y el toque de queda, lo cual
fue una sucia treta muy propia de terroristas de ultraizquierda.
Para evitar nuevas sorpresas la Conferencia Episcopal ya inició
operaciones con arengas de los obispos. En cuanto a Urosa Sabino, éste
aprovechó la fiesta de la Divina Pastora para lanzar la primera bola,
tal como acostumbran algunos cardenales, y no precisamente los del
equipo de beisbol.
Por su parte, Alberto Federico Ravell, a nombre de los medios, señaló
de manera realista que tres millones de dólares alcanzan para pocos
días de publicidad intensa.
Otros indicaron que una guarimba bien organizada se lleva un dineral y
el que lo dude le puede preguntar a Robert Alonzo, especialista en
importar paramilitares desde la Colombia a la zona del Hatillo.
A todas éstas, el negociante gringo ripostó que María Corina Machado y
los voluntarios de Súmate nunca preguntan qué pueden hacer los Estados
Unidos por ellos, sino más bien qué pueden hacer ellos por el imperio
gringo, pidiendo lo elemental para operar un consejo electoral
paralelo dotado de los últimos adelantos cibernéticos.
Como el tiempo es oro los partidarios de la libre empresa no perdieron
un segundo en desacuerdos y acordaron desarrollar la campaña por el NO
mientras los estudiantes sifrinos manifiestan en las calles y los
mercachifles de siempre alientan el consabido desabastecimiento
preelectoral.
augusther@cantv.net