Debido a la crisis económica en EEUU, los norteamericanos ya muestran signos de cansancio o agotamiento. La recesión económica en EEUU ha originado no solo despidos masivos (cuyas cifras oficiales no muestran los millones de despidos de ilegales o indocumentados), si no también pérdida de viviendas, quiebra de empresas, deterioro de la calidad de vida, etc.
A esto le sumamos los billonarios planes de rescate del gobierno norteamericano a los bancos y empresas, con el dinero de los contribuyentes, que fueron directo a los bolsillos de los inmorales magnates.
Además, se ha incrementado la violencia y la venta de armas a civiles ha aumentado desde que Obama asumió la presidencia.
Para colmo, el plan de salud de Obama ha sido hostilmente rechazado durante semanas por los republicanos, convirtiendo al Congreso en un campo de batalla. Los estadounidenses esperan y esperan, mientras los republicanos ponen piedras en el camino.
Estos patriotas congresistas no quieren aprobar un plan de salud para sus ciudadanos, pero si aprueban 700 mil millones de dólares más, de los trillones que ya se han invertido, para la invasión a Afganistán.
Todas estas situaciones han ocasionado agotamiento en los estadounidenses, quienes han salido a protestar y a manifestar su rechazo a las medidas tomadas o no tomadas por el gobierno. Y como siempre, la mayoría de las protestas en EEUU son ocultadas por las transnacionales canallas de la comunicación que todos conocen.
Los estadounidenses ya están cansados del guabineo del Departamento de Estado. Las protestas aumentan cada día por más que las repriman. Las pancartas en las manifestaciones ya no son las mismas, y la foto habla por sí sola: ¿Una revolución se esta gestando en EEUU?
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