Lo denunció el Presidente. La verdadera fuente –política y financiera- del Plan “Consenso País”, lanzado por esa colcha de retazos que se hace llamar oposición, es Washington. Es el poder imperial yanqui, el cual pretende aplastar la revolución bolivariana, haciendo uso del fraude, la presión descarada y la manipulación mediática.
Nada originales los autores del mencionado Plan. Es lo que ocurre siempre con los mercenarios pagados por las multinacionales y el capital imperialista. Su labor se reduce a replicar los manuales de la explotación y expoliación de los pueblos y las naciones mas pobres del planeta, en particular las latinoamericanas.
El “consenso país” no es más que otro nombre del “consenso de Washington”. En este caso, el paquetazo neoliberal del imperialismo gringo para nuestra nación.
Como es sabido el difundido “Consenso de Washington” es la estrategia del poder político-económico-imperial integrado por el FMI, BM, el Congreso de los EUA, las grandes corporaciones multinacionales, la Reserva Federal y los altos burócratas del gobierno-USA.
En 1989 John Williamson, analista del Institute for International Economics acuñó el término The Washington Consensus, que fue la divisa bajo la cual se aplicó todo el recetario neoliberal del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial en América Latina.
Al hacer la lectura del libraco opositor se van encontrando, como en un riguroso calco, cada uno de los diez instrumentos del Consenso de Washington, plasmados dizque como originales propuestas para nuestra nación: disciplina fiscal, no más déficit fiscal; control de la inflación como asunto prioritario; reducción del gasto publico, especialmente en el sector social; mas impuestos indirectos; manipulación de la tasa de interés; tipo de cambio libre; liberalización de las importaciones; libertad a la inversión extranjera directa; privatizaciones a granel, ahora de la educación, la salud, el agua y todas las políticas sociales (sin perjuicio de que se prometa el mantenimiento de las Misiones bolivarianas por parte de los demagogos exizquierdistas); y desregulación de los mercados
Son bastante conocidos los resultados de la aplicación de este recetario en toda América Latina: desempleo, pobreza, corrupción, quiebras, desindustrialización y autoritarismo.
Argentina es un ejemplo bastante dramático. Para citar un solo caso. Es lo que nos ofrece la "redentora" oposición.
¿Qué tal?. Sin más más comentarios.