Ahora el Imperio refina la perfidia de sus guerras hasta avanzar más allá de la aniquilación. Guerras mnemónicas, con rayos que quitan al pueblo invadido su memoria como pueblo y lo dejan con la mente en blanco. Guerras disociativas que anulan la fuerza de atracción entre las moléculas y convierten a la nación víctima en torbellino de micropartículas. Guerras sólo mata gente que pulverizan la carne y dejan al país como una colmena vacía. Guerras sólo mata cosas que dejan intacta la gente pero en el inmenso agujero que una vez fue su patria. Guerras asociativas que obligan a los cerebros a invertir sus respuestas y en vez de correr para salvarse avanzar hacia la muerte. Guerras mutágenas que obligan a cada organismo a convertirse en la especie a la cual preda. Guerras geriátricas que activan el gen del envejecimiento y en pocas horas vuelven al enemigo decrépito. Guerras recesivas que invierten el curso del tiempo y devuelven los combatientes al vientre materno. Guerras cronológicas que eternizan la duración del tiempo y logran que la respuesta de los invadidos demore siglos. Guerras comunicacionales que confunden aleatoriamente las comunicaciones de manera que nadie sabe qué pasa. Guerras sicológicas que convencen al enemigo de que ya está muerto. Guerras tectónicas que hacen permeable la superficie al magma candente de las entrañas de la tierra. Guerras desertificantes que evaporan toda el agua hacia el espacio exterior. Guerras concausales que disocian la causa del efecto de manera que todo puede ocurrir sin ningún motivo. Guerras energéticas que cuestan más energía que las reservas que conquistan. Guerras de confusión que impiden al ser humano atacante distinguirse del ser humano atacado y lo llevan a agredirse a si mismo con estas armas y todas las restantes.
ERRATA
Camilo Neto como perfeccionista termina metido a corrector de pruebas. Sabe que el libro sin error es imposible, pero a cada nueva revisión lo intenta. Ya esto mismo lo desconcierta pues ello significa que en cada acto humano, desde la elección amorosa hasta el vuelo de los aeroplanos, la falla es no sólo posible sino fatal. Cae en sus manos la tesis de Jesús Alberto León donde éste demuestra que la tasa de las mutaciones biológicas es constante. La mutación, que es como la errata de la naturaleza, es entonces la responsable de la diversidad de las especies y en particular de la nuestra, que resulta así un compendio de fallas de copia desde la primera célula viviente. Cómo puede afanarse en corregir la errata alguien que es la sumatoria de ellas desquicia a Camilo Neto, quien desde entonces sólo revisa memorias científicas hasta que da en la certidumbre de que el Universo mismo es un error de copia de la nada. No tiene que soportar demasiado este tormento. Alza la vista y divisa el lápiz que baja a corregir la errata. Usted no lo va a creer: en el momento en que termino de escribir este relato, en lugar del punto final aprieto la tecla equivocada que lo borra, y debo reescribirlo.
GÉNERO
Se declara guerra entre feministas y machistas. Feministas atacan usurpándole a machistas sus principales defectos bebida tabaco promiscuidad. Machistas contraatacan legalizando divorcio. Feministas responden copando profesiones abominables como literatura derecho judicatura política. Machistas arremeten monopolizando profesiones peores como modisto estilista decorador. El holocausto llega a su clímax cuando cada bando comprende que se ha convertido en lo que odia. Una delegación de boleristas es enviada a rendirse. Un equipo de fisioculturistas es mandado a recibirlos. Esperamos angustiados sin saber si los estrangularán o si volverán a convertirse en coquetas.
LA REVOLUCIÓN
Una revolución silenciosa está a punto de estallar en el idioma. El lingüista Linguini denuncia que hay palabras dominadas, categorizadas por los estilistas como plebeyas por su número y su condición de útiles. Las tiranizan las palabras dominantes, prestigiosas, académicas y usualmente indescifrables, vale decir inútiles. Las opresoras tienden a organizarse en circunloquios, perífrasis, lugares comunes y digresiones para ocultar su apropiación ilegítima de la riqueza del sentido. Las palabras dominadas en su vivaz ingenuidad caen siempre en la trampa de las construcciones gramaticales donde las dominantes las encierran. De vez en cuando una palabra poética rompe las barreras y extiende el fuego de la insurrección en el idioma. Se sabe que es poética por el gusto con el cual las lenguas la saborean. La policía gramatical trata de matarla o de detenerla en las aduanas del idioma. Tildan las prosodias de terrorismo el entusiasmo de la voz que dice. Las consecuencias son terribles pues cuando la palabra se libera todo lo demás la sigue. Voces del mundo, uníos. No tenéis nada que perder, salvo vuestras sintaxis.
EL JUEGO DE LA VEJEZ
Muy viejos son la Tierra y el Universo pero nadie sabía cuándo comenzaría la vejez propiamente dicha. De repente la Tierra comienza a arrugarse, surgen demasiadas nuevas cordilleras y nadie se explica la causa. La cabellera de las cumbres blanquea, caen los dientes de las sierras y el temblor intermitente se hace casi ininterrumpido. Hay inundaciones y nadie sabe si la tierra llora o babea. De repente empieza a perder el tino en la carrera de su órbita. La memoria falla. Ya no hay fósiles en los estratos arcaicos ni recuerdos en los cerebros. Los más enérgicos preparan las naves para el Éxodo a mundos juveniles en donde todavía los tiempos pasados no son los mejores. Entonces se descubre que el Sol empieza a chochear.
INSTANTE
De niño sueña llenar los instantes con juguetes, maravillas, jonrones. De joven con amores, revoluciones, ascensos. Tanto tiempo después empieza a vaciarlos de todo, pues cuanto el instante contiene lo opaca. Al final llega a contemplar cada instante cada vez más despojado, casi en su resplandeciente vacío. Cuando lo logre, ya no necesitará más instantes.
(Texto/imagen: Luis Britto)
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