Vemos con beneplácito, la aprobación en primera discusión, en la Asamblea Nacional, de la “Ley de Protección de las Pensiones de Seguridad Social, frente al bloqueo imperialista”, la cual está siendo sometida a consulta pública en estos momentos.
Para nadie es un secreto, las penurias que viven los pensionados, por el monto de las pensiones otorgadas por el Seguro Social, entendiendo que esta situación al igual que el salario mínimo nacional, obedece al cerco financiero que tiene nuestro país por el bloqueo criminal al que estamos sometidos.
En la citada Ley, se establece, una contribución especial a las personas jurídicas de carácter privado, que realicen actividades económicas en el territorio nacional, de hasta el quince por ciento (15%) del total de los pagos realizados a los trabajadores y trabajadoras por concepto de salario y bonificaciones de carácter no salarial; estableciendo anualmente, el Presidente de la República, el porcentaje correspondiente de la contribución especial, de acuerdo con el tipo o clase de actividad económica.
Esta contribución especial, será declarada y pagada mensualmente al SENIAT; con el aliciente para las empresas contribuyentes, que tal contribución especial será deducible del gasto para el cálculo del Impuesto sobre la Renta.
Proponemos que se indique en la Ley, un monto mínimo a devengar por parte de los pensionados, de doscientos dólares mensuales (US$200,00), calculado a la tasa del BCV, siendo efectivo dicho monto, a partir del sexto (6°) mes de vigencia de la presente Ley, para permitir realizar los pagos, al contar el ejecutivo nacional, con parte de ese fondo de contribuciones especiales.
Además proponemos, que todos los recursos objeto de confiscaciones de bienes objeto del narcotráfico o hechos de corrupción por parte de funcionarios públicos, sean destinados al pago de estas pensiones y una porción de ello para el fondo destinado al pago del salario mínimo de los trabajadores, pudiendo así, ir incrementando, paulatinamente, los salarios a la clase trabajadora de nuestro país.
Es importante recalcar, que la Ley propuesta contempla, que la contribución especial, es distinta e independiente de los aportes que corresponde a los empleadores y empleadoras realizar al Instituto Venezolano de los Seguros Sociales.
Sabemos lo delicado que están nuestras finanzas personales, pero, poco a poco, el gobierno ha ido buscando soluciones para hacer más llevadera esta carga, y puedan contar tanto los trabajadores activos como pensionados, con un salario digno que los ayude a sufragar sus necesidades.
