Por medio de la presente, haciendo uso de la querida revista digital Aporrea.org hago expresa mi inquietud por la separación de su puesto de trabajo, y correspondientes derechos laborales y sindicales al dirigente petrolero Orlando Chirino.

Mas por otra parte, no suscribo concientemente ninguno de los petitorios que hacen al gobierno revolucionario de la República Bolivariana Venezuela varias organizaciones internacionales, pidiendo lo mismo; lo que no implica que considere injusta e inoportuna la separación de Chirino de su puesto de trabajo y sus prerrogativas como dirigente sindical.

Mis razones por ambas decisiones las ofrezco a continuación:

1. No existe ninguna razón legal válida y sustentable para que Chirino sea separado de su puesto de trabajo. En caso de existir debiera hacerse públicas y notorias las causas y entregarlas por escrito al interesado. ( puede que existan y no las conozcamos)
2. Orlando Chirino fue un dirigente que representó al gobierno revolucionario venezolano, por lo cual las razones de su despido se hacen más necesarias frente a los ojos de los trabajadores.
3. Además de poder constituir una injusticia, este desafuero es por demás inoportuno, convirtiendo en víctima a un trabajador cercano a la jubilación y que puede interpretarse como una medida impositiva contra sus opiniones políticas.
4. Considero que desde el punto de vista legal y humano debe ser restituido inmediatamente a su puesto de trabajo porque ni él ni su familia deben padecer las vicisitudes del desempleo.
5. Desde el punto de vista político es todavía más relevante: Pudiera parecer que sus posiciones contra las reformas constitucionales han dañado a la revolución bolivariana...Y no es el caso. Él fue uno más de los instrumentos de la orquesta, que sin pretenderlo tocó a contramarcha. Orlando Chirino se distanció él solo del proceso, asumiendo una actitud independiente y haciéndose eco de los que acusaban a Chávez y su proyecto como agente del imperialismo. No hace falta pues que el gobierno lo distancie. Considero una estupidez política hacerlo.

Estoy hablando para los que me conocen. Sé que es muy difícil transitar por el filo de la navaja, pero parece ser éste mi destino, con el solo objeto de ser honesta con la revolución, so pena de quedarme absolutamente sola.

¿Por qué no firmo tranquilamente los petitorios internacionales, como he hecho en múltiples casos, siendo la única firmante cubana?: Porque a mí el NO.... NO se me olvida

1. El SI o el NO que se llevó a discusión en Venezuela no era, como muchos quieren hacer aparentar, cualquier cosa. En medio del terror mediático más alucinante; en medio de conflictos, temores, desaciertos, aquel apresurado Referendo significaba mucho para el la causa de los trabajadores, por la que Chirino dice haber trabajado toda su vida.
2. Todo lo que digo aquí lo sabe él de mis propios labios y lo saben muchos de los dirigentes de la izquierda venezolana. Es por eso que lo hago público con total tranquilidad.
3. Hayamos perdido o no, la única posición revolucionaria que yo acepto, es haber estado en aquellos momentos a favor de las enmiendas que desde la Constitución de la República permitirían luchar mejor por los trabajadores y el pueblo.
4. Chirino y sus compañeros dijeron NO a que las Fuerzas Armadas de Venezuela ostentaran el adjetivo de antiimperialistas, votaron NO por una geometría del poder, que al menos constitucionalmente daría más poder al pueblo a través de los poderes comunales, votaron NO por el derecho al seguro social de los trabajadores informales.....esos que no tienen derecho, por el momento a ostentar un puesto en PDVSA. Votaron NO porque Chávez, con sus errores, incapacidades, pero con el deseo más honesto del siglo XXI, pueda seguir o no siendo electo por su propio pueblo.
5. La oportunidad, el liderazgo la casualidad, son categorías de la historia. No tomarlas en cuenta es un error grave, que ya veremos como lo pagamos.

Es por eso esta aparente ambivalencia: Pido a nombre de la revolución, que con lágrimas y uñas tratamos algunos de hacer valer por la vía electoral aquel día 2 de diciembre; pido como única observadora internacional de Cuba en el Bloque del SI, que se le restituya el empleo a Orlando Chirino, por considerar injusta e inadecuada la medida.

Pero con el mismo fervor pido no solicitarlo a nombre de organizaciones y personas que nunca entendieron hasta qué punto nos estábamos jugando la permanencia de la revolución en aquellos días.

Y aun más, vuelvo a solicitar de todos los que se llaman trotskistas, o marxistas que recuerden o vuelvan a leer lo que representa una revolución acosada por todos los flancos, que recuerden todo lo que tuvo que hacer el Jefe del Ejército Rojo cuando más de diez potencias extranjeras querían destruir la revolución bolchevique; que recuerden una vez más la soledad ideológica en que abandonaron a todas las revoluciones que trataron de triunfar alguna vez, aludiendo a esquemas reduccionistas que negaban de punta a rabo a León Trotsky

A la burocracia, a la burguesía, incluso a la boliburguesía no se le combate detrás del mostrador aliándose temporalmente al Imperialismo. Se le combate en las mismas trincheras de la revolución, se le combate demostrando a los trabajadores de Venezuela que ellos son hoy el principio del mundo y que deberán de espantar el aldeanismo escaso y reivindicativo al que lo quieren someter un par de sectas.

Entonces ¡No! No nos entendemos con el poder escuálido y burócrata que pretende acallar la voz de la escasa oposición ¿de izquierda? arrebatándole el empleo a uno de sus miembros; ni con las organizaciones de ¿izquierda? que de seguro sin proponerlo hicieron coro común de alegría a la derecha oligárquica y el imperialismo en aquella madrugada cuando perdimos en Las Reformas.

A ambos, que de seguro en la oscuridad de las urnas dijeron NO, aunque esté totalmente sola nuevamente, les digo lo mismo que dijo José Martí una vez:

“Va con la humanidad el que va solo....que todos oyen cuando nadie escucha”.