Uno de los aspectos más importantes del proceso revolucionario es la comunicación en todos los órdenes; desde el ejemplo realizado por el pueblo llano en los albores del golpe de Estado del año 2002, cuya presencia en el boca a boca se convirtió espontáneamente en el adalid que como instrumento movilizó a la gente en defensa del proceso y por el regreso del presidente; hasta el Aló Presidente que se convirtió en el medio ideal para bajar líneas y mantener la información de lo hecho y de lo que se va a hacer y porque no de lo que no se ha hecho.
Son muchos los hechos y sucesos cuya falta de respuesta inmediata ha ocasionado dudas o al menos permitido que la oposición haga fiestas por un tiempo determinado a través de sus famosos inventos, distorsiones o simple desinformación. En el terreno del chavismo muchos casos han quedado en el oscurantismo como es el caso del exministro Samán, sobre lo cual no se ha dado mayor explicación; la explicación a veces no ha convencido a tientas de lo que se supone o presupone sobre tal o cual caso, sencillamente, porque pareciera dejarse a la libre interpretación y en estas cosas es peligroso y hasta realmente inconveniente no aclarar dudas.
Les confieso y sin buscar ayuda de nadie que pueda informar, que es en realidad lo que ha pasado con el “hallazgo” de contenedores en varios sitios y donde supuestamente la República ha perdido miles de millones de bolívares por alimentos en mal estado; casi en una semana todos los medios de comunicación inclusive algunos del proceso suministraron información sobre este “ fenomenal” caso, por supuesto los medios privados de nuevo hacían fiesta con el asunto y solo nos enteramos que el único culpable es un expresidente de Pedeval o una empresa filial, hasta ahí estuvimos informados sobre la marcha de la cosa.
Ahora bien, del total de contenedores encontrados nadie desmintió al respecto, sobre la cantidad y efectos causados al contenido de los mismos, lo que trajo mayor desinformación y honda preocupación que eso estuviera pasando en medio o en los prolegómenos de una campaña electoral como es la de setiembre próximo. En verdad les digo, que mi indeterminación me alejó de alguna explicación sana sobre lo ocurrido, en razón al menos de callar ante la indefensión en que me encontraba.
El pasado sábado 5 de junio entrevistan en programa especial por el canal 8, a la presidenta de Pedval, quien ofreció cifras sobre la verdadera afectación de los alimentos y la real cantidad de contenedores, introduciendo otro elemento que hasta la fecha no sabíamos, que todos los contenedores no estaban contaminados o que los que si estaban contaminados pero que no se podían destinar al consumo humano y que podrían servir para hacer derivados o que sencillamente ya no servían. En fin, habló de mil y pico de contenedores que serán sometidos a exámenes de laboratorio porque el resto aún no se han nacionalizado y cuya responsabilidad recae sobre los importadores privados, si todo esto es verdad, porque hubo de esperar casi una semana para decir todas estas cosas, sin percatarse que hay toda una campaña de descrédito en el contexto de lo que se ha llamado golpe económico y no se haya aligerado las informaciones al respecto.
A veces entiendo al presidente, cuando llama la atención o forma soberano pero preciso regaño porque no se ha hecho tal o cual cosa, el presidente como administrador de la cosa pública está en la obligación de pedir explicación al menos, del porque no se asumió una defensa íntegra contra el ataque diario de la oposición, o lo consideraron de piche situación o el piche sentido de la comunicación se convirtió en sombra de todos los que seguimos este proceso revolucionario, cosas como esta no han debido pasar, no por el hecho mismo sino la forma de privación de la comunicación respectiva.
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