Estimados camaradas socialistas, no saben la inmensa alegría que siento por el reciente traslado, de los archivos de Miranda y de Bolívar, a la sede del Archivo General de la Nación, realmente como hombre que desde hace un corto tiempo he tomado el camino de las letras, no puedo menos que alegrarme, de que ahora esos documentos estarán al alcance de todo el mundo, por lo menos en su versión digital y no como era, hasta hace unos días, para uso exclusivo de un muy reducido grupito de tecnócratas que hacían vida en la academia, eso mis queridos camaradas es una inmensa alegría y un innegable logro de nuestra revolución socialista.
Al fin el bulbo común, el pueblo, la gente de a pie, tenemos acceso, de primera mano, de manera directa a los documentos escritos, de puño y letra, por estos dos grandes próceres de nuestra independencia y no tenemos que conformarnos, como era lo normal en la academia, con tener que leer resúmenes y en el mejor de los casos análisis hechos por grandes historiadores, pero que siempre venían cargados con la parte de opinión del ilustre historiador, es decir, la historia ya venía analizada, no se nos entregaba el hecho para analizarlo por nuestra propia capacidad, sino que ya se nos da este hecho analizado, masticado y claro está, sesgado al interés de quien emite esta opinión.
Este traslado de los documentos, además de ser un evento harto feliz en la historia académica de Venezuela, también sirve y viene como anillo al dedo, para esa serie de artículos que he escrito dando claros ejemplos de la diferencia entre el socialismo que estamos empeñados en llevar adelante en nuestra bella patria y el anacrónico capitalismo que tanto defiende y añora la pequeña burguesía cuarto republicana en Venezuela.
Si mis queridos camaradas, este es un ejemplo más que claro y contundente, veamos, en la época en que estos archivos reposaban en la sacra sede de la academia, estos estaban en una bóveda muy bien resguardada, bajo condiciones de protección y resguardo como en las mejores instituciones del mundo y valga la pena decirlo, como corresponde a documentos de esta envergadura, ahora bien, su uso era limitado y muy bien custodiado, los libros llevaban un trato casi de bebes, como realmente debe ser, y hay que ser sinceros, en este aspecto no tiene tacha el trato, que por años, dio la academia a este tan importante archivo de documentos.
El problema mis queridos camaradas, es que como siempre, para estos señores muy estudiados ellos, muy preparados, con miles de especializaciones, nosotros el bulbo, el pueblo, el ciudadano de a pie, somos gente ignorante, gente bruta, incapaz de leer un documento e interpretarlo, de ahí, que existan un canal de televisión como Globovision y me disculpan la desviación, pero este ejemplo es más que claro, donde para encontrar un hecho hay que esperar horas, porque todas las noticias que ahí se encuentran ya están analizadas, ya están digeridas, para que la masa ignorante y silente del pueblo las entienda, claro está, siempre con el enfoque editorial de los dueños del canal.
Pues lo mismo era en la academia, estos libros son un preciado tesoro, estos libros son de muy difícil interpretación, hay que estar muy capacitado para leer estos libros, estas eran las eternas excusas que se daban en el seno de la academia a cualquier mortal que quisiese tener acceso a estos documentos, que al fin y al cabo, son de todos los venezolanos, o no?. Pero bueno, con la excusa y muy cierta por cierto, del posible maltrato y deterioro de estos documentos, este precioso legado permaneció oculto a la luz del pueblo venezolano, del ciudadano común, solo para el uso de unos privilegiados seres.
Si notamos un poquito y pensamos otro poquito más, nos damos cuenta, que la actitud de la academia frente al uso de los archivos de Miranda y Bolívar, no es más que un fiel reflejo de lo que fue la sociedad venezolana bajo le egida capitalista pequeño burguesa de la cuarta república, donde todo tenía que ser manejado por tecnócratas, meritocratas, gente preparada, que fuese capaz de arrear a esta masa de burros ignorantes que éramos el pueblo, jamás nos daban un dato, un hecho, una noticia, siempre un análisis, una opinión, una interpretación, hecha claro está, por una persona muy preparada, pero también muy “interesada”, esto era en dos palabras, lo que ocurría en la cuarta república venezolana.
Ahora analicemos este caso desde la óptica socialista, desde la llegada al poder de nuestro comandante presidente Chávez y el inicio inmediato del proceso revolucionario tendente a refundar la sociedad venezolana, bajo una ética socialista, bajo una forma de ver la vida socialista, humanista, de inclusión, de igualdad general y es aquí, justamente donde el ejemplo de la academia, para mostrar la diferencia entre capitalismo y socialismo, cae como anillo al dedo. Ya hemos visto como era el trato a estos importantes documentos en el seno de la academia, ahora veamos como los trata el archivo general, bajo el mando de grandes compatriotas revolucionarios.
Lo primero que hay que decir, es que nuestros camaradas socialistas, que en este momento se encuentran al frente del Archivo General de la Nación, no tienen nada que envidiarle en el aspecto académico y cultural a la ilustradísima gente que está a cargo de la academia, la gran diferencia radica en el carácter socialista de los primeros y como buenos socialistas, entienden claramente, que al pueblo hay que darle información, hay que ponerle al alcance de la mano todos los datos, todos los hechos, todas las noticias, para que sea justamente el pueblo el que se encargue de analizarlas, el que se encargue de entenderlas y sacarse su propia opinión y a partir de ahí, entonces buscar el análisis, la opinión de las personas, que consideremos más preparadas o más informadas que nosotros y a partir de ahí, iniciar un debate de ideas que nos permita entender la realidad profunda de los hechos.
Mis estimados camaradas, esa es la gran diferencia entre el capitalismo y el socialismo, para los primeros el pueblo es una masa ignorante a la cual hay que guiarla a través de la vida para que no tenga problemas, ni sufrimientos, aunque esto conlleve a la eterna ignorancia de esa masa, al fin y al cabo, eso es lo más importante, porque mientras más ignorante más fácil se maneja y se engaña, por el contrario, el socialismo lo que busca es lograr la mayor educación, la mayor cultura, en la mayor cantidad posible de pueblo, es decir, para el socialismo mientras más preparado es su pueblo más crítico y más capaz de entender cuál es la vía que le conviene y está en capacidad de intervenir en cada proceso y lo que es más importante, es capaz de opinar y dar ideas de manera constante.
Esta más que claro que el traslado de los archivos de Miranda y Bolívar de la academia al Archivo General de la Nación, es un gran logro de la revolución, es un momento de alegría para todos aquellos que nos consideramos libres pensadores y es un más que un claro ejemplo de la diferencia entre capitalismo y socialismo. Ya para finalizar, no me queda más que felicitar a la gente del archivo, ya que tal y como lo prometió, ha comenzado a digitalizar los documentos de estos archivos y ya están en su página al acceso de TODO EL PUEBLO.
SOCIALISMO ES CULTURA Y LIBERTAD PARA TODO EL MUNDO, CAPITALISMO ES CULTURA PARA UN GRUPITO Y DOMINACION SOBRE TODO EL MUNDO.
pito0726@hotmail.com.
