Luego entonces no sería mala idea lanzarle un Yo te aviso chirulí a US para desenmascarar de manera humorística su aviesa intención política de atemorizar al pueblo católico en nombre Dios. Ya me imagino al simpático personaje de la cuña sacándole el jugo al adeco ensotanao. “¡Cristiano tú. Yo te aviso chirulí!”.
A propósito deberían pautar Yo te aviso chirulí en los espacios de las televisoras privadas que le corresponden por ley al Estado. O en su defecto contratar un paquete de cuñas en la parrilla publicitaria de esas estaciones. El efecto, disculpen la expresión sería arrechísimo.
Yo te aviso chirulí se parece al anja del llanero, que usted se cree que el veguero le está creyendo todo lo que usted le está diciendo y el camarita lo que está es vacilándolo. “Ponte a cree en cuentos de caminos y no trabajes”. “Este cree que me está engañando”. “ quien le oye roncando cree que está durmiendo. “
Yo te aviso chirulí es una expresión de incredulidad venezolana; no te creo, sigue creyendo. Se usa cuando estamos en presencia de alguien que pretende engañarnos disfrazando sus intenciones. Como Urosa Sabino que con su sotana y en nombre de Dios trata de engañar al pueblo católico diciendo que Chávez es comunista. “¡Yo te aviso chirulí!”.
No sé. Pero se me antoja que sería un tiro aplicarle un Yo te aviso chirulí a ese tercio. Todo encuadrado en el debido respeto a la fe cristiana. Asimismo otro al tridimensional éxito del Banco Venezuela en contraposición a La Canalla Mediática que dice que toda empresa que el Gobierno le pone la mano quiebra ¡Yo te aviso chirulí!.
TINTERO
Toda crítica negativa que emitan los compatriotas en contra de la Revolución Bolivariana en los medios de la Revolución es aprovechada por la Canalla Mediática. Hablemos nosotros de la cosas buenas; que La Canalla Mediática se encargue de las malas. La Revolución tiene demasiados enemigos y muy poderosos para que nosotros mismos le echemos paja. Existen los canales internos para formular las críticas negativas. Y si no funcionan mala leche. Así son los procesos revolucionarios. Con el tiempo se depuran los males. Además el camino es largo y requiere de mucho tiempo. La locomotora de la Revolución Bolivariana apenas está arrancando. Y son y serán muchos los que se irán quedando en las estaciones intermedias así como muchos los que se embarcarán. Ahora es cuando este peo se está poniendo bueno y bonito.
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