Hay un periodista zuliano que divide a la gente que adversa al
gobierno venezolano en tres grupos. Al primero lo denomina opositores
y expresa por ellos respeto; al segundo grupo lo denomina escuálidos
y se expresa de ellos como escoria; al tercero lo define como
esguácala y complementa su definición llamándolos sucios.
Siempre nos pareció que las definiciones de Nectario eran un tanto
exageradas. Sin embargo este fin de semana comprobamos cuan acertada
es su clasificación.
Buscando información en la web sobre la desaparición de Wilian Lara,
nos encontramos con centenares de mensajes que confirman la tesis de
Nectario sobre los escuálidos (no los opositores).
gobierno venezolano en tres grupos. Al primero lo denomina opositores
y expresa por ellos respeto; al segundo grupo lo denomina escuálidos
y se expresa de ellos como escoria; al tercero lo define como
esguácala y complementa su definición llamándolos sucios.
Siempre nos pareció que las definiciones de Nectario eran un tanto
exageradas. Sin embargo este fin de semana comprobamos cuan acertada
es su clasificación.
Buscando información en la web sobre la desaparición de Wilian Lara,
nos encontramos con centenares de mensajes que confirman la tesis de
Nectario sobre los escuálidos (no los opositores).
Sentimos lástima ante tanta pobreza espiritual en la mensajería
escuálida; pero es tan abundante la misma que no nos quedó otra
opción que reconocer que al periodista zuliano le asiste la razón
cuando afirma que son unos farsantes borrachos de odio, que aparentan
ser cristianos y hasta asisten a misa.
Cualquiera que los escuche quejarse de la violencia en las calles, de
la agresividad del discurso presidencial y del ataque del que son
víctimas los representantes de la iglesia, pensarían que son
ciudadanos nobles que aspiran un mejor país. La realidad, sin embargo
es que son unos farsantes que no tienen el menor reparo en lanzarse a
manifestar públicamente su inmensa alegría cuando alguien que tiene
ideas diferentes fallece… Son en resumen escoria de la peor especie.
Como si no tuvieran madre o hijos, andan por este mundo de Dios
deseando la muerte de los chavistas y festejando cuando alguna
ocurre. Para muestra de lo que afirmamos, veamos algunos de los
mensajes de estos “seres humanos”:
escuálida; pero es tan abundante la misma que no nos quedó otra
opción que reconocer que al periodista zuliano le asiste la razón
cuando afirma que son unos farsantes borrachos de odio, que aparentan
ser cristianos y hasta asisten a misa.
Cualquiera que los escuche quejarse de la violencia en las calles, de
la agresividad del discurso presidencial y del ataque del que son
víctimas los representantes de la iglesia, pensarían que son
ciudadanos nobles que aspiran un mejor país. La realidad, sin embargo
es que son unos farsantes que no tienen el menor reparo en lanzarse a
manifestar públicamente su inmensa alegría cuando alguien que tiene
ideas diferentes fallece… Son en resumen escoria de la peor especie.
Como si no tuvieran madre o hijos, andan por este mundo de Dios
deseando la muerte de los chavistas y festejando cuando alguna
ocurre. Para muestra de lo que afirmamos, veamos algunos de los
mensajes de estos “seres humanos”:
Una escuálida (¿o esguácala?) de nombre Lissemar escribe en Noticiero
digital, sobre la muerte de Wiliam Lara, lo siguiente:
“La verdad es que cuando me pasaron el mensaje al principio sentí
cierta emoción, pero un poco más calmada y fría, me dio tristeza
albergar en mi esos sentimientos, porque quiere decir que Chávez está
logrando su cometido conmigo también, me está deshumanizando y eso no
lo quiero para mí. Todo aquel que se deshumaniza es capaz de matar a
otro sin el mayor dolor.
Sólo espero que el mismo Dios me ayude a borrar de mi esta alegría
que siento hoy”
¿Qué les parece? Definitivamente Nectario tiene razón, son unos
sucios. Se alegran por la muerte de un adversario político, lo
expresan públicamente y aún tienen el descaro de echarle la culpa a
Chávez por toda la basura que llevan por dentro.
Es tan inmoral, la autora de esa nota que luego de regodearse en su
odio, le pide a Dios que le quite la alegría que siente por la
muerte, cuando ni siquiera siente vergüenza por festejarlo en
público.
Otros enfermos escribieron cosas como estas:
digital, sobre la muerte de Wiliam Lara, lo siguiente:
“La verdad es que cuando me pasaron el mensaje al principio sentí
cierta emoción, pero un poco más calmada y fría, me dio tristeza
albergar en mi esos sentimientos, porque quiere decir que Chávez está
logrando su cometido conmigo también, me está deshumanizando y eso no
lo quiero para mí. Todo aquel que se deshumaniza es capaz de matar a
otro sin el mayor dolor.
Sólo espero que el mismo Dios me ayude a borrar de mi esta alegría
que siento hoy”
¿Qué les parece? Definitivamente Nectario tiene razón, son unos
sucios. Se alegran por la muerte de un adversario político, lo
expresan públicamente y aún tienen el descaro de echarle la culpa a
Chávez por toda la basura que llevan por dentro.
Es tan inmoral, la autora de esa nota que luego de regodearse en su
odio, le pide a Dios que le quite la alegría que siente por la
muerte, cuando ni siquiera siente vergüenza por festejarlo en
público.
Otros enfermos escribieron cosas como estas:
“Le deseo un feliz hospedaje en el Infierno !!!! le va a hacer
compañía a Tascón.”
“El planeta se está limpiando”
“Algo está pasando en la granja porque los amos se están muriendo uno
a uno” “Comenzó el castigo de Dios”
“Una MIERDA menos, porque eso era.. una MIERDA”
“La fiscal va a imputar al río...por magnicidio”
Este desenmascaramiento voluntario del que hacen gala, en su inmensa
felicidad por la muerte de los chavistas, debemos darlo a conocer a
nuestro pueblo, quienes ejercemos el papel de comunicadores.
Necesario es que se conozca la felicidad que sienten. Ello reforzará
en nuestro pueblo la convicción de que no pueden y no deben volver
pues sólo albergan odio, desprecio por los humildes y una inmensa
miseria espiritual.
compañía a Tascón.”
“El planeta se está limpiando”
“Algo está pasando en la granja porque los amos se están muriendo uno
a uno” “Comenzó el castigo de Dios”
“Una MIERDA menos, porque eso era.. una MIERDA”
“La fiscal va a imputar al río...por magnicidio”
Este desenmascaramiento voluntario del que hacen gala, en su inmensa
felicidad por la muerte de los chavistas, debemos darlo a conocer a
nuestro pueblo, quienes ejercemos el papel de comunicadores.
Necesario es que se conozca la felicidad que sienten. Ello reforzará
en nuestro pueblo la convicción de que no pueden y no deben volver
pues sólo albergan odio, desprecio por los humildes y una inmensa
miseria espiritual.