Estuve muy
atento para llegar a la estación del Metro, antes de la hora “PICO”,
pues generalmente y todos los días, el servicio se torna una verdadera
pesadilla.
Cuando llegué
a la entrada de los trenes, estuve mosca porque me dijeron que a pesar
de la vigilancia de la Policía, se producen numerosos atracos y delitos
en los subterráneos.
Igualmente
alguien me informó que en los subterráneos siempre hay el peligro
de que “algún loco, ponga una bomba o algo peor”.
Siempre me
han informado que el Metro es un lugar muy propicio para contraer enfermedades
infecciosas, así que a conciencia no quería tocar mucho los pasamanos
o barandas que abundan en el sistema.
Como tendría
que venir algo tarde, me preocupaba la situación del metro en
la noche, pues es conocido que aunque los atracos aparatosos son poco
frecuentes, si lo son la presencia de maleantes “especializados”
que te aplican varios trucos, para sacarte el dinero o tus pertenencias,
cortándote los tirantes de los back packs o incluso el bolsillo trasero
del pantalón.
Otro problema
son los buhoneros y mendigos en las salidas, que te salen al paso ofreciendo
toda clase de baratijas o simplemente pidiendo dinero directamente.
Noté
que el acceso a los minusválidos en las estaciones es bastante difícil.
En muchas estaciones
del METRO aparecen los llamados “Músicos del Metro”, quienes interpretan
canciones y luego piden algo de dinero, aunque no son peligrosos.
Otro asunto
preocupante en el Metro son las personas que aparentemente discuten
con violencia o tienen una apariencia rara, lo mejor es no involucrarse
con ellos y si es necesario uno se debe cambiar de tren.
Las estadísticas
dicen que cada 11 kilómetros de recorrido, se produce una falla en
el METRO, es decir que por diversas causas las averías de los trenes,
el acondicionamiento del ambiente y los cortes eléctricos son frecuentes.
Para el 16
de junio pasado un “joven resultó herido en una pierna al quedar
atrapado por la puerta de un ten”.
Desde los años
70 se ha sabido de severos accidentes en los sistemas Metros del mundo:
En el Metro de Valencia, España, un tren se descarriló y murieron
41 personas, en 1995, en Bakú, Azerbaiyán, murieron 290 personas al
incendiarse un tren, dentro de un túnel, igual al accidente anterior
ocurrió en Londres y murieron 32 personas, con 150 heridos.
En fin, a pesar de mis sombrios pensamientos, el tren se deslizaba raudo hacia su destino y yo esperaba pacientemente llegar a la estación SIXTH AVENUE en la línea BRODWAY EXPRESS de la ciudad de NUEVA YORK.
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