La traición
es una manifestación del egoísmo por sobre el interés colectivo,
la avaricia por encima de la lealtad. Las Revoluciones sociales son
movimientos guiados por profundos sentimientos de amor; la traición
a la revolución, es un hecho que responde al más soez llamado de la
mezquindad.
Muchas son
las revoluciones que han sido traicionadas por distintos motivos y circunstancias.
Estudiar sus particularidades y especificidades nos ayudarían a comprender
mejor los procesos revolucionarios.
El 30 de abril
de 1826, el general José Antonio Páez, héroe
del pensamiento independentista, dirige un movimiento político llamado
“La Cosiata” con la finalidad de separar a Venezuela
de "La Gran
Colombia". El
sueño de Bolívar y su perseverante tarea por la consolidación de
la Gran Colombia, había sido traicionado por uno de sus camaradas de
armas y dirigente del movimiento independentista.
El Libertador
llega de nuevo a Bogotá en 1830 para instalar el Congreso Constituyente
llamado a salvar la unidad de la Gran República. Pero Venezuela se
agita de nuevo, y se proclama Estado Independiente. La oposición crece
y se fortalece en todas partes. Bolívar, enfermo y agotado, renuncia
a la Presidencia y marcha a la costa con el propósito de viajar a Europa.
El asesinato en Berruecos del General Sucre, quien hubiese podido ser
el continuador de su obra, y el rechazo de quienes entonces gobiernan
en Venezuela, le afectan profundamente. La revolución gran colombiana
había sido traicionada, pudieron más los designios personales y la
nueva oligarquía que empezaba a gestarse en Suramérica.
Un 5 del mes de marzo de 1870, nace Rosa Luxemburgo, una de las más prestigiosas y combativas dirigentes marxistas que la historia nos ha regalado. Participa activamente en el ala izquierdista del Partido Socialdemócrata Alemán. Su ardua labor comprometida con la causa marxista de las revoluciones, la consagró como una líder destacada en el movimiento. Mantuvo siempre una lucha implacable contra los reformistas y revisionistas de la socialdemocracia alemana.
Un 15 de enero
de 1919, la socialdemocracia aparece implicada directamente en el asesinato
de Rosa Luxemburgo, quien tiempo antes había escrito su gran obra “Reforma
o Revolución”, dedicada a los reformistas y revisionistas de la socialdemocracia
alemana.
Lenin reconoció
y respetó el legado de Rosa Luxemburgo, de esa manera lo expresó en
1924: “Su biografía y la edición de sus obras completas representarán
una valiosa lección para la educación de muchas generaciones de comunistas
de todo el mundo.”
Pero el gran
líder de la revolución bolchevique, Vladímir Ilich Lenin, tampoco
escaparía de la traición. A dos años de su siembra, en 1922,
Lenin escribió un documento que se conocería mas tarde como su testamento
político. En el documento se propuso cambiar profundamente las estructuras
del gobierno soviético, y se avizoraba de manera clara, el peligro
que representaba Iósif Stalin, para la revolución rusa: “El camarada
Stalin, convertido en secretario general, ha concentrado en sus manos
un poder ilimitado, y no estoy seguro de que siempre sepa utilizarlo
con la suficiente prudencia.”
Leon Trotsky,
quien se concebía como el sucesor oficial de Lenin, había sido engañado
y perseguido hasta su asesinato en México, por los esbirros de la dictadura
estalinista. La revolución rusa derivó en un gran poder burocrático
y traicionó los ideales de justicia social que habían levantado los
líderes bolcheviques.
El 4 de noviembre de 1970, un medico y político socialista chileno, llamado Salvador Allende, llegaba al poder por medios electorales, levantando las banderas del marxismo y la justicia social. Tan solo duraría 3 años como presidente de Chile; la avaricia y la avidez de los militares chilenos, azuzados por el imperialismo norteamericano, pudo más que la determinación del Gobierno Popular de Salvador Allende.
El 29 de junio de 1973, se llevó a cabo el denominado Tanquetazo, golpe de estado
fallido en contra del gobierno socialista del presidente Salvador Allende.
Se le denominó "Tanquetazo" porque los rebeldes usaron primordialmente tanques
y carros de combate pesados. La sublevación fue sofocada con éxito
gracias a los esfuerzos de los generales Prats y Pinochet.
El día 23
de agosto, a las 17:00 h, se reunieron Allende, Prats y Pinochet en
el Palacio de la Moneda. Al finalizar la reunión, Pinochet fue nombrado
comandante en jefe. Este gozaba de la confianza del general Prats, y
había mostrado lealtad hasta los momentos.
El 11 de septiembre
de 1973, las bombas llovieron sobre el palacio de la moneda. Un Golpe
de Estado conducido desde el Norte de América, y encabezado por el
General Augusto Pinochet, daría muerte al socialista Salvador Allende,
y acababa con el sueño universal de la Revolución Socialista por vías
“pacificas”. Empezaba el infierno que habría de vivir Chile por
años, en lo que se conoce como una de las dictaduras más sangrientas
de América Latina.
Hay quienes
aseguran que la historia es cíclica, que esta condenada a repetirse.
Lo cierto es que la historia la hacen los pueblos, la impulsan los pueblos
y su determinación de querer ser libres.
Desde la Revolución
Bolivariana, impulsamos la posibilidad de relacionarnos de una manera
más justa en sociedad, de vivir en respeto y complementariedad con
la naturaleza. La tierra que parió Simón Bolívar, Zamora, y demás
héroes de nuestra-américa, está comprometida con los pueblos del
mundo a seguir manteniendo la esperanza viva; construir la utopía es
cada vez más necesario y urgente.
General Müller Rojas:
“Hay que ir eliminando ese círculo de hierro de la burocracia que ha encerrado al presidente y le ha cortado la relación directa que tenía con la sociedad. Ese círculo ha generado una burocracia privada a través de prácticas que eran normales en la democracia representativa, pero que son absolutamente fuera de orden en una democracia participativa y esa situación ha generado una pérdida de confianza que afecta la figura presidencial, porque la gente lo percibe como que él tiene cierta responsabilidad y sobre todo afecta al PSUV que aparece como un partido al estilo de las viejas organizaciones de la democracia participativa que defendían intereses grupales.”
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