La Revolución Bolivariana vive bajo el acecho permanente del imperio norteamericano, quien aplica lo que podríamos llamar una “contrarrevolución permanente”. De todos/todas quienes nos sentimos identificados con el concepto de Patria, patriotas, venezolanos/venezolanas, está el identificar aquellas acciones que emplea el imperialismo, a través de sus agentes en territorio patrio, para desestabilizar nuestro Gobierno Revolucionario y colocarlo en entredicho ante la comunidad internacional. El reciente ejemplo de Libia, es indicativo de cuanto ha perfeccionado, el imperialismo, sus acciones desestabilizadoras. La mentira se convierte en verdad y, a la vez, justificativo hasta incluso, para una invasión imperial por países que se nos presentan como modelos de democracia, como ocurre con la Europa, arrastrada a los pies del imperio gringo.
“Insulza habría señalado que en Venezuela existe una fuerte crisis que podría empeorar en 2012. Por su parte Chaderton afirmó que “Insulza es un personaje que abandonó la OEA por un año para hacer campaña en Chile en un viaje que hizo probablemente con fondos de la OEA”. De esta forma actúa el imperio; Insulza, su empleado agrede a Venezuela desde su posición de secretario general de esa instancia internacional, creada por los EEUU para controlar la América, eso que pareciera una simple agresión, una más de las tantas que ha formulado ese nefasto agente imperial, sus intenciones las develamos si armamos completa la pieza del rompecabezas en que se encuentra inserta la jugada de Insulza. Por esos días, se realizaría en nuestra Patria una cumbre de los países del Alba que entre los temas que tratarían, estarían los hechos de Libia, y de seguro, tal como ocurrió, se pronunciarían a favor de una salida política a la guerra civil que ha propiciado el imperio norteamericano en tales tierras, con el objetivo claro de colocar sus garras sobre las riquezas petroleras y acuíferas del pueblo libio. El imperio, a través de Insulza, buscaba desviar la atención sobre lo tratado en la cumbre y restarle, con ello, resonancia al pronunciamiento de ese importante grupo de países de nuestro continente.
El caso Rubén González, debemos ubicarlo dentro de una estrategia imperial para desacreditar al Gobierno Revolucionario ante instancias internacionales, como un Estado violador de los derechos laborales, un Estado Forajido. Veamos el por qué nos atrevemos a denunciarlo de esa manera. En agosto de 2009, González lidera una huelga en Ferrominera, motivado a incumplimientos de la contratación colectiva. En septiembre de ese año, se le detiene por presuntamente estar incurso en los delitos de agavillamiento, instigación pública a delinquir, restricción a la libertad del trabajo, y violación de la zona de seguridad, días después, un juez ordena el arresto domiciliario de González, y éste permaneció en esa condición hasta el 21 de enero de 2010, fecha en que otro juez ordena su arresto en la cárcel de la sede policial Patrulleros del Caroní. La complicidad judicial es notoria, en esta estratagema imperial, la necesidad de revolucionar ese poder del Estado Bolivariano es más que urgente, camarada Luisa Estela Morales.
El caso se extiende hasta este año, en que es liberado por la presión ejercida por sindicatos revolucionarios como la Únete. En el teatro paralelo de operaciones, a nivel internacional, se está realizando la reunión del Comité de Libertad Sindical de la OIT, este mes de marzo, donde los agentes imperiales tienen sendas denuncias contra nuestra Patria, una de ellas, por ejemplo es la introducida por la patronal Fedecámaras, que aseguran que en Venezuela no hay libertad sindical y que el Estado limita el diálogo con los empresarios, otras organizaciones gremiales empresariales tales como Fedeindustria, Confagan, Coboiem y Empreven; alega también Fedecámaras, un supuesto fomento, por parte del Gobierno Revolucionario, de un entorno hostil para los empleadores por privación de tierras.
Introduce queja, también Fedecámaras, ante la OIT sobre el hecho delictivo en que se vieron incursos algunos de sus miembros y en que resultó lesionada Albis Muñoz, ex presidenta de ese organismo patronal. Quejas que, si las analizamos a profundidad, deben ser desmontadas con cierta facilidad por los representantes del Estado Bolivariano ante ese organismo internacional. Les faltaba un hecho contundente, que evidenciara ante el mundo, que en nuestra Patria se lesionan los derechos sindicales, el caso Rubén González era indiscutiblemente un hecho contundente, venía de liderar un conflicto sindical, días después es detenido y sentenciado a cárcel, sin duda Rubén González se convertiría así, en el primer preso político de la Revolución Bolivariana, gracias a los Tribunales de la República, tal como ocurría a menudo en la cuarta república, que resucitaba de sus cenizas. Por fortuna, la sapiencia de los/las líderes del Estado Bolivariano detuvo esa afrenta a nuestra Constitución y se libera a Rubén González.
El imperio ante esta nueva derrota, no le queda otra sino transfigurar su derrota en victoria, le ordena a su nuevo agente, retrátate con los huelguistas profesionales, hazle ver al mundo que tu liberación fue gracias a los estudiantes huelguistas, nuestros agentes juveniles. Así ocurre, y la foto que recorre al mundo es la de Rubén González y los jóvenes de Javu, con los brazos alzados, rememorando aquel episodio de nuestra historia reciente en que Luis Ugalde le alzaba los brazos a Carlos Ortega y Pedro Carmona Estanga, semanas antes del golpe de Estado de Abril de 2002. El mensaje esta enviado, la próxima huelga de los estudiantes victoriosos será…para exigir la renuncia del Presidente Hugo Chávez Frías, el objetivo sigue siendo el mismo, solo cambia el método para obtenerlo!!!
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