Es fundamental la unidad de todas las corrientes que conforman al pueblo chavista, base del proceso bolivariano. Este pueblo, rodilla en tierra, debe conjurar las maniobras de la derecha venezolana y del imperio, orientadas a debilitar nuestro proceso. Es hora de poner el acento en la consolidación y triunfo de la revolución bolivariana. No son los debates y las críticas lo que le puedan hacer daño a la unidad, a la fortaleza de este proceso. Se debe frenar, sí, las pugnas por cuotas de poder y centrar todas las energías en la profundización de la revolución bolivariana trabajando activamente por la solución de los problemas populares y la defensa del planeta.
La Misión Vivienda, Agropatria y todas las misiones, la seguridad de todos los ciudadanos y ciudadanas, la defensa de los precios del petróleo, la cooperación Sur-Sur y todas las formas de solidaridad y cooperación de los pueblos, la lucha por caminos alternativos a la globalización neoliberal, contra la militarización de las relaciones internacionales y a las guerras que el imperio promueve, la solidaridad con Cuba, Bolivia, Ecuador, Nicaragua y todos los pueblos; la lucha por los equilibrios ecosistémicos, contra el cambio climático y la pérdida de la diversidad biológica, deben seguir siendo fundamentos esenciales del proceso bolivariano.
La enfermedad del Presidente Chávez no es un hecho excepcional ni puede crear una crisis política en el país. No hay un vacío de poder. Están previstas todas las soluciones institucionales para esta situación y para que el Presidente Chávez ejerza todas sus competencias. Los poderes públicos venezolanos deben garantizar que todas las instituciones funcionen. Igualmente, la Fuera Armada Bolivariana debe garantizar la vigencia de nuestras instituciones democráticas y conjurar cualquier amenaza contra ellas.
En Paraguay el Presidente Fernando Lugo ha venido siguiendo un tratamiento contra el cáncer linfático y ahí está, al frente del gobierno. También en Brasil la Presidenta Dilma Rousseff ha visto afectada su salud.
Hay un Vicepresidente Ejecutivo, el compañero Elías Jaua y está al frente del gobierno. Para el todo nuestro respaldo, todo nuestro apoyo.
La movilización y la vigilancia popular deben garantizar la continuidad y profundización de la revolución bolivariana.
Hay que garantizar el funcionamiento de todos los servicios públicos, de las empresas públicas, las empresas de producción social, las cooperativas, las comunas, los consejos comunales, los sistemas de salud y educación, etc. Hay que asegurar que la crisis alimentaria mundial no afecte a los venezolanos, que la inflación se mantenga bajo control, que la distribución de la riqueza continúe profundizándose a favor del pueblo.
Las organizaciones populares deben ponerse al frente de todos los procesos políticos y sociales, es el momento de expresar que el socialismo es poder del pueblo. La unidad es un fundamento esencial para la victoria.
Estamos seguros de que esta prueba será superada. La derecha debe saber que los revolucionarios venezolanos tenemos la madurez y la fuerza como para garantizar que la revolución, una vez más, triunfará. Sabremos neutralizar las vibraciones de odio y de venganza, con vibraciones de esperanza y de fe en que todas las energías del universo reaccionaran ante las fuerzas positivas que están tratando de construir y bloquearan las energías negativas amantes de la destrucción. El pueblo organizado cumplirá con los deberes que le corresponden.
julio.escalona99@yahoo.com