La derecha, al no poder tomar el poder por la vía del putsch, en febrero del 2003, en vez de serle sincera a su militancia y decir un “por ahora”, por intermedio de Herman Escarra idearon, convertir un referéndum consultivo en revocatorio, para salir de Chavez, pero esa treta se les vino abajo, después idearon un “firmazo”, y después, no sé porque mecanismo de “convenimiento político”, ya que eso ni estaba ni está escrito en ninguna ley, se les dio una oportunidad para que “se arrepintieran” o retiraran las firmas del firmazo.
Es bueno hacer estos recordatorios, que ahora se pueden ver mejor ya que se han ido despejando muchas dudas y aclarando muchas cosas y sobretodo porque cada día se van cayendo muchas caretas. Me recuerdo que en estos días de “retiro de firmas”, estaba en su apogeo “la lista de Tascón”, y en muchos ministerios y dependencias de gobiernos chavistas, tanto nacionales, regionales como municipales, habían muchos escuálidos que habían firmado en contra del presidente en el célebre “firmazo” y estaban al desnudo por culpa de Tascón, quizás ese retiro de firmas, haya sido por acuerdo con la derecha o sin él, que se utilizó al CNE de Jorge Rodríguez, para que escuálidos, con cargos en gobierno o aspirantes a él, retiraran su firma y así acallar a los sectores radicales que con lista de Tascón en mano, desenmascarábamos a muchos jefes y altos cargos gubernamentales que habían participado en el “firmazo”.
Lo anterior, es bueno hacer un paréntesis, para reseñarlo, aunque nos salgamos un poco del tema porque evidencian que dentro del denominado chavismo (Yo siempre he preferido llamarlo de otra forma y no personalizarlo), siempre ha existido una derecha endógena (Honor y gloria a Luis Tascón), al asecho para desviar este proceso, cuestión que hasta ahora va siendo bastante exitosa en ese empeño, lo lamentable que el éxito de esta macolla, es la destrucción del país.
Hasta que por fin el CNE de Carrasquero y Jorge Rodríguez decretó que la derecha si había recogido las firmas y se decidió efectuarlo el 15-A-2004.
EL REFERENDUM UNA GRAN VICTORIA POPULAR PRACTICAMENTE ECHADA POR LA BORDA
Quizás el evento político, después de la aprobación de la constitución en 1999, en donde hubo el mayor índice de participación popular, que hubiese sido mayor, si existiesen más centros electorales, fue ese del 15-A, yo particularmente vine a votar casi a las 12 de la noche, una vez votado toda la gente que pude haber arrastrado a votar. De haber habido más mesas de votación, repito, el índice de participación hubiese sido mayor.
En ese momento la derecha quedó descuartizada y tan entendió que se le había acabado su cuarto de hora, que canto fraude para seguir manteniendo, por medio del engaño y la manipulación, una clientela que le permitiera pervivir políticamente.
La demostración de esa “muerte política” de la derecha estuvo en las próximas elecciones de noviembre de ese mismo año, para Gobernadores y Alcaldes, en donde perdió por paliza.
Pero el triunfo del 15-A, trajo una cosa malísima, que es lo que nos tiene al borde del abismo, al borde de perder este oportunidad de realizar un proceso de transformación revolucionaria, oportunidades que se presentan, en este país cada 50 años, desde la era bolivariana (Bolívar, Zamora, Cipriano Castro, los adecos y Chavez) y que la hemos desaprovechado por negligencia, por indiferencia, por falta de vigilancia revolucionaria, en donde el líder, tiene una responsabilidad principal, ya que se ha permitido que una infiltración de derecha se haya ido apoderando de este proceso y no se hayan hecho las transformaciones o por lo menos haber dado los pasos para esa transformación y por el contrario, el proceso se ha ido deteriorando, se ha ido perdiendo el encanto, se ha ido desgastando precisamente por la no profundización del proceso, y hoy la derecha se ha vuelto a recuperar y está a punto de ganar unas elecciones ( o por lo menos de tutearse, lo que es un retroceso) a la revolución, después que un día como hoy, un 15 de agosto, hace 7 años, quedó tirada en la lona bajo los efectos de un KO fulminante.
