Estimados camaradas socialistas, en vista de los recientes acontecimientos acaecidos en nuestra bella patria, cuna de Bolívar, es que he decidido escribir este muy crítico artículo. Para refrescar la memoria sobre estos acontecimientos, y como si eso en este país tan politizado fuese necesario, de mis muy queridos lectores, me estoy refiriendo, en primer lugar, a la terrible enfermedad de nuestro comandante, presidente y líder de la revolución Hugo Chávez Frías. Esta enfermedad que ha propiciado una pugna interna dentro del partido de gobierno por ser la nueva cabeza visible del chavismo; amen de la lucha intestina en las filas de la oposición por ser el gallo contendor, ante la posibilidad de la falta absoluta en el poder de nuestro líder.

El segundo acontecimiento dentro de este recuento que le sirve de base a mi artículo, es la renovada crisis eléctrica que tanto afecta a nuestro país; y el como esta no se ha manejado de manera idónea, por lo menos en el apartado informativo, por parte de los responsables de esta materia en el alto gobierno.

Dentro de estos dos hechos noticiosos, es mas que obvio, que voy a mencionar el eterno manejo mediático que se le da a estos hechos en los canales privados de desinformación; así como, el trato no muy profesional de estos hechos en el canal del estado; y ya para finalizar, analizare como estos acontecimientos han sido, en buena parte, los responsables del clima político efervescente que se vive en estos días en nuestro bello país.

Gracias a estos hechos, anteriormente nombrados, y tras su análisis minucioso, es que he llegado a la conclusión, muy critica, de que en Venezuela en vez de tres “R” (tan cacareadas por la revolución) lo que hay son tres “I”, y eso sí, a la enésima potencia. Estas “I” no son otras que: la Ineptitud, la Irresponsabilidad, y la que para mí es la peor de todas, la Ingratitud. En este artículo voy a tratar de analizarlas, una a una, basándome para ello en el conjunto de hechos noticiosos que he mencionado primeramente.

Comencemos a analizar cada “I” en el orden en que las he expuesto en el titulo. La primerita a analizar es la Ineptitud; y aquí, aunque resulte muy doloroso reconocerlo como venezolano, responsable y participe, la ineptitud en nuestra patria campea libremente y anda desbocada.

Comenzare por analizar este vicio, de nuestra sociedad moderna, con el primero de los hechos noticiosos antes mencionados, a saber: la enfermedad de nuestro presidente. La ineptitud noticiosa de los medios opositores en este tema es casi supina, por decir lo menos. Para los medios de comunicación de masas, de clara tendencia opositora, hemos pasado de un cáncer de próstata, a un cáncer de colon, sin olvidar un tumor cerebral o una cirrosis hepática; y la teoría, altamente ridícula, de un tiro en la pierna por parte de un amante burlado; y que decir de que toda la enfermedad es tan solo un invento de nuestro líder; todo esto lanzado al boleo de la vida publica con la mayor irresponsabilidad y frescura; que aparte de hacerme pensar en que todo obedece a un claro plan de desestabilización, no es menos cierto, que también hay una enorme dosis de ineptitud y falta de profesionalismo de estos medios y sus acólitos.

En este punto no quiero dejar por fuera lo que fueron los primeros días de la enfermedad y el comportamiento, poco profesional (por decir lo menos), que le dieron al hecho la gran mayoría de los altos jerarcas de nuestro gobierno. Su falta de información, sus media tintas, sus contradicciones casi inmediatas, sus dimes y diretes, esa pugna vedada por ser el primero en la noticia y así hacer ver que se es el favorito, no distaban mucho de la ineptitud que se veía en la acera de enfrente; eso sí, llego el comandante y mando a callar.

Es hora de dar honor a quien honor merece, y en esto nuestro presidente y comandante Hugo Chávez Frías dio una clase magistral, no solo de valentía y profesionalismo, sino de propiedad y autoridad muy por encima de sus acólitos más cercanos, y que decir de sus opositores más acérrimos. El presidente tomando, como debe ser, la vocería de su problema nos dejo muy en claro todos los sucesos, todos los pormenores, y para ello se tomo todo el tiempo necesario; y mil victores a él por eso, ya que para dar su declaración espero hasta tener su panorama muy claro y muy en firme, fue solo en ese momento que tomo la decisión de comunicarse al país y aclarar todos los sucesos; claridad esta, que estaba muy ausente entre los dos bandos.

Ahora quiero tocar en este apartado de la ineptitud el otro tema, que para mí es bandera de justamente el nivel de ineptitud que campea en Venezuela en los actuales momentos, y este no es otro que el tema eléctrico; tan sufrido y tan atacado por nosotros los venezolanos. Por desgracia en este apartado tengo que referirme a una de las personas que más he admirado a lo largo de mi vida como humano y como socialista, y es que me voy a referirme a ese gran luchador y pensador social como lo es el actual ministro de la energía eléctrica, el Sr. Ali Rodríguez Araque.

Porque es así ministro, y como honor a quien honor merece, también su cuota de responsabilidad a quien la tiene, y Ud. la tiene y mucha; no en el manejo de la situación, porque me consta que no solo ha sido diligente, sino oportuno y emprendedor; pero el manejo informativo, me disculpara Ud. ministro, pero no fue el mas acertado posible.

Como podemos olvidar los venezolanos lo que fue la grave crisis energética que se sufrió en Venezuela a raíz de la gravísima sequía que vivimos en nuestro país, que hizo bajar a la principal fuente energética del país, entiéndase el Gurí (esta suministra más del 70% de la energía eléctrica que se consume en Venezuela), a niveles dramáticos y de gran alerta.

Claro que no podemos olvidar los cortes y los sufrimientos, los racionamientos y los apagones; pero tampoco se puede olvidar su actuación y la de los suyos, diligente y oportuna, creando nuevas fuentes energéticas, creando un plan de ahorro energético nacional, todo maravilloso y repito oportuno; pero, y siempre hay un pero, como es posible que a pesar de mil solicitudes, que me consta que se le hicieron; Ud. anunciara con bombos y platillos que el problema energético, la crisis energética en el país estaba solventada, que ya se la había dejado atrás.

Aún tiene el venezolano muy fresco en la memoria su alocución en cadena nacional anunciando, con bombos y platillos repito, el fin de la crisis energética, el fin del racionamiento eléctrico, el fin del ahorro energético, el fin de las multas, y vuelvo a repetir aunque se me llame canson, que me consta que se le pidió de mil maneras “prudencia”, ya que el problema distaba mucho de estar solucionado. El problema era estructural, era de fondo, pero muy ineptamente, y le pido disculpas por eso, pero es así, Ud. tomo la vocería e hizo anuncios a la nación que no lograron sustentarse en el tiempo, ni siquiera por un año.

Ministro Araque, ese mal anuncio suyo le hizo más daño a la revolución y a la popularidad de nuestro líder, que mil acciones emprendidas por la más rancia y carroñosa oposición; ministro lo que venia haciendo, y de maravilla, con las manos lo deshizo en un momento con la lengua, y es así, responsabilidad a quien responsabilidad lleva, y en este aparte, este punto de ineptitud le cae completito a Ud.

Ya para finalizar con este doloroso punto de la ineptitud de nuestros componentes sociales (entiéndase nosotros), como olvidar el calvario que sufrimos todos los venezolanos cuando nos toca lidiar con un empleado, bien sea de la administración publica o de la empresa privada, y vemos con gran dolor la caterva de ineptos que están al frente de puestos bajos y medios de nuestros quehaceres diarios.

Quien no ha querido matar a un grosero, impertinente e incapaz empleado de banco, que en vez de solucionarnos el problema, lo único que hace es darle largas y terminar diciendo: “responsabilidad compartida”; o estrangular a un inhumano doctor, que se olvida que trata con seres humanos y no con perros sarnosos que vienen a molestarlo en sus momentos de tranquilidad; o con un asesor de clientes en una empresa de cable televisión, señores no se encuentra uno que sepa donde esta parado; y ya para terminar con los patéticos ejemplos, quien no ha querido golpear a un profesor de matemáticas de 3 año de bachiller, que se escuda en la razón de que por ser profesor de matemáticas no tiene que saber cual es la capital del estado Monagas, y señores, de estos profesores tenemos miles, y a ellos solo les cabe una palabra: INEPTOS; y en fin, pare Ud. de contar, porque les repito es doloroso ver todo esto.

Ahora bien, y muy fiel a mi costumbre, no se critica sin dar soluciones, sin dar ideas para la posible minimización de esta campante ineptitud en nuestro quehacer diario; y la solución es simple pero a la vez compleja. Es simple porque se trata de la EDUCACION y es compleja porque nuestro sistema, supuestamente educativo, lo único que hace es ENSEÑARNOS técnicas y procedimientos, pero educarnos para el fino arte de la vida, para esas cosas molestosas, pero harto necesarias, como lo son la ética, la moral, la mística, el orgullo a lo bien hecho, de eso mis estimados lectores en nuestro sistema educativo hay pero que muy poco.

Quiero ahora hacer referencia a un suceso de mi vida que viene como anillo al dedo para este punto que estoy tratando. Hace ya un buen tiempo tuve el inmenso placer de conocer a un gran arquitecto y trabajar para él. Era un gran profesional y muy buscado en nuestro bello país. Él siempre a la hora de hacer planos, sobretodo los de las áreas interiores de las casas, se tomaba un muy buen tiempo para colocarle adornos, es decir, dibujaba cuadros, sofás con cojines, alfombras con sombras y dibujos; y que a la hora de mostrárselos a los clientes, en la gran mayoría de los casos, estos ni notaban estos detalles preciosistas.

Pasado un tiempo me decidí a inquirirle el porque se tomaba tanto tiempo en hacer todos estos detalles que a la hora de la verdad el cliente ni reparaba en ellos; y su respuesta fue tan clara, sencilla, pero a la vez contundente, que se me quedo grabada de manera imperecedera en mi psiquis, y la respuesta fue: “yo los veo”. Señores, es así de claro y sencillo, el dibujaba para él, él era su máximo critico y solo su satisfacción al trabajo bien hecho le hacia acometer todos los recursos que le fuesen necesarios para lograr sus “mini obras de arte”.

El ejemplo anterior creo que habla por si solo, la mística, el amor a su trabajo, el orgullo a lo bien hecho, hacían de este hombre un gran arquitecto y súper profesional; y como esto lo aplicaba a la vida diaria, lo hacia también un hombre excepcional. Basta ya con el ejemplo que es más que conciso entre lo que es un hombre bien educado y otro bien preparado para una misma función.

Toquemos en estos momentos la otra “I”, que por orden del titulo corresponde a la Irresponsabilidad. De igual manera que en el aparte anterior me voy a referir, primeramente, a la enfermedad de nuestro líder y presidente; y de igual manera empezare con la oposición. Ya a estas alturas del juego político en Venezuela hablar de irresponsabilidad se ha vuelto, tristemente, un tema trillado.

Como es posible que todos, absolutamente todos, los medios de desinformación opositores se hayan dado a la malhadada tarea de desinformar en un hecho noticioso tan importante, y a la vez tan grave, para el desenvolvimiento diario de nuestra sociedad. Como es posible que hayan esgrimido sin el menor temor, ni la mas mínima pena ajena, ni el menor dejo de profesionalismo, pisoteando, una y otra vez, la ética profesional del periodista, una sarta de rumores, de dimes y diretes, sin la mas mínima sustentación; y todo ello amparados en dos temitas muy recurrentes y por ende cansones, a saber: la falta de información oficial y la libertad de expresión.

Ahora bien, yo quiero que alguien que me lea, me haga el favor de buscar y me enseñe, donde dice que la libertad de expresión es decir lo que se le de la gana a uno en un medio masivo de comunicación, y mas aun, si esto se trata de la enfermedad del líder principal de la patria. Tengo mucho tiempo buscando esa “frasecita milagrosa” que tanto esgrime la oposición para decir lo que se le venga en gana.

Por otro lado, como es posible que la falta de información oficial pueda ser excusa a la creación de las fantasías más rebuscadas, que se le puedan ocurrir al periodista que de turno cubre la información; eso mis estimados solo se puede llamar IRRESPONSABILIDAD, así de claro.

Esa falta de información oficial tiene su buena cuota de “irresponsabilidad” en el alto gobierno; porque es así, si bien me he cansado de lanzar loas al presidente porque solamente se dirigió al país, cuando tenia la certeza absoluta de que es lo que le pasaba y hacia donde iba; no es menos cierto, que la gran mayoría de sus altos jerarcas en el gobierno no merecían otra cosa que una soberana patada en las posaderas; porque si la información no emanaba de su sitio natural, entiéndase el presidente, entonces señores, porque no decir: “NO HAY COMENTARIOS”, “ESPEREN AL AVISO OFICIAL”. Esas dos frasecitas que bien habrían caído en las bocas de nuestros jerarcas, una vez que se hizo evidente que el líder tenía problemas.

Y no me vengan que con la falta de información lo que se hace es darle pie a los rumores y crear zozobra, cuando es exactamente lo contrario. Las medias informaciones, las informaciones vedadas, las contradicciones casi automáticas entre las versiones de los diferentes lideres, el eterno turnarse en la toma de la vocería oficial, esas si fueron las razones que dieron pie a los rumores y a la zozobra que se vivió en esos días en nuestra patria; así que muy señores míos, tanto de la oposición, como altos jerarcas nacionales, en este tema han obrado como unos soberanos IRRESPONSABLES.

Ahora veamos el otro hecho noticioso, a saber: el problema eléctrico, desde la óptica de la irresponsabilidad. Comencemos, una vez más, con la ilustrada oposición venezolana. Como es posible que los dirigentes políticos de la tan sonada mesa de la unidad de democrática, o entiéndase mejor, esa caterva de viejos políticos, y algunos no tan viejos apadrinados por estos, que se autoproclaman la nueva alternativa democrática, y en algunos casos se mientan como “la tercera vía” (cualquier parecido con desastrosos pasados recientes es mera coincidencia); disculpen lo largo de la presentación, pero es que estos señores se la merecen; como decía, como es posible que se den a la tarea de casi suplicarle a sus acólitos disociados en grado extremo, que hagan todo lo posible para hacer el mayor consumo eléctrico que pueda cada una de estas personas, y contribuir así, con la caída definitiva del régimen mediante la exacerbación de la crisis eléctrica; eso a parte de ser harto irresponsable es IMBECIL.

Como olvidar el casi éxtasis que sentían estos ilustrados y muy patriotas señores cuando veían el nivel acuático del “Gurí” descender día con día; prácticamente tenían el mayor de los orgasmos al pensar el enorme caos del alto gobierno cuando esta planta generadora, como ya hemos dicho, del 70% de la energía eléctrica del país, tuviese que parar sus turbinas, y así, Venezuela caería en el peor de los caos, al quedar prácticamente a oscuras.

El párrafo anterior, por si solo, es mas que enunciativo de la tamaña irresponsabilidad que tiene nuestra oposición apartida; que poco importa el caos y la desgracia que se genere, poco importa las casi seguras cientos de victimas que se sucediesen, poco o nada importaría el desorden y la anarquía infalible en estos caóticos acontecimientos; es así, nada de eso les importaría, ya que lograrían su tan anhelada meta como lo es salir del gobierno.

No se puede dar mayor muestra de irresponsabilidad y a la vez de ineptitud, ya que necesitan que un acontecimiento poco menos que fortuito, y por lo demás harto catastrófico, les haga el trabajo que en buena lid, esta caterva de INEPTOS es incapaz de hacer.

Ahora veamos este problema eléctrico y sus implicaciones “irresponsables” en nuestro gobierno. Señores míos, ya basta, a dos años de la iniciación de este problema eléctrico en nuestro país, de hablar de quintas columnas; ya esta bueno; no se dan cuenta que al tener dos años largos que este cuento lo único que hacen es demostrar su enorme ineptitud y a la vez irresponsabilidad.

Pensemos lo anterior un segundo para que se nos aclare el panorama. Es mas que cierto que los quinta columnas estaban, están y creo que estarán enquistados en nuestro gobierno por un tiempo más; pero esto es culpa de quien; de ellos; para nada; esos tipejos hacen lo que creen que deben hacer en la vida; la irresponsabilidad es nuestra, la ineptitud es nuestra, ya que si focalizamos el problema en ese aspecto ¡COÑO! (espero sepan perdonar el ajo, pero se cansa uno), tienen dos años largos en los que han sido unos inútiles en identificarlos, unos soberanos ineptos en execrarlos, y unos claros incompetentes, al no crear sistemas de control que no permitan que esos gusanos arrastrados del imperio regresen una y mil veces; por favor señores se cansa uno.

No me alargo mas en el apartado de la irresponsabilidad; y se bien que todos, pero todos los que me lean, sean de un grupo o de otro; o los que creen que no pertenecen a ninguno y no son mas que lastre útil que los poderosos usan a su antojo; repito, se bien que todos tienen miles de ejemplos mas de irresponsabilidad; tanto de un lado como de otro, pero creo que estos dos ejemplos que he dado son mas que elocuentes y claros de que es lo que esta pasando.

Solo quiero referirme a un pequeño punto, ya ahora si para finalizar con la irresponsabilidad. Recordemos el 4 de febrero de 1992, cuando por primera vez en nuestra bella y amada patria, desde que existen medios de comunicación de uso masivo, se vio, ante los ojos de todo el mundo, a una persona aceptar su FRACASO; hacerse RESPONSABLE de su FALLO; asumir toda su RESPONSABILIDAD ante un ERROR; eso lo vimos TODOS los venezolanos ese día; y señores, todos sabemos, muy bien, quien es y como le ha ido a través de la historia.

Ahora me referiré al último punto o “I” que me queda por tratar, como lo es el de la Ingratitud. Quiero hacer notar en este punto, que he dejado en el tintero otra “I”, que se bien, que la gran mayoría de mis lectores pensaran que quizás era mas oportuna o mas inmediata o mas importante que esta “I”, entiéndase la ingratitud, y me refiero a la Intolerancia.

Ciertamente tendré que darles un punto de razón a todos aquellos que así piensen; pero me defenderé diciendo que esta arista de la Intolerancia no se puede tratar a la ligera, es un punto tan critico y tan peligroso que requiere, no solo un articulo completo para ella, sino uno muy sesudo, pensado y critico; y no es que este no lo sea, pero si la colocase en el, este se haría aún más largo de lo que ya es; amen de darme tela para un próximo articulo.

Aclarado el punto del porque prefiero a la ingratitud sobre la intolerancia para este articulo, empezare su análisis. En este apartado no me voy a referir a los ejemplos puntuales que me han servido de base para el articulo, entiéndase la enfermedad de nuestro líder y la crisis eléctrica; ni tampoco me referiré a la clase dirigencial, a nuestra gente del gobierno; al igual que la gente de la revolución; no, haré básicamente referencia a gente de la oposición, pero eso sí, a los de abajo, a los del pueblo, no a los dirigentes; amen de tocar a aquellos pseudos socialistas que no aguantan ni el mas mínimo escrutinio para mostrar inmediatamente el bojote..

Quiero empezar este análisis con un sector tan golpeado y tan maltratado en época de la cuarta, y tan revindicado por este nuestro gobierno socialista, como lo es el grupo de viejitos de nuestra patria en edad del cobro de su pensión. Hay que ver como hay ingratos en este sector. De nada vale que uno les recuerde que antes de Chávez tan solo eran 300.000 los pensionados y hoy en día vamos rumbo a los tres millones (seguramente que si estuviésemos aun en la cuarta, estos viejitos ingratos no cobrarían nada); de nada vale recordarle que la homologación de la pensión con el sueldo mínimo es un logro de este proceso revolucionario (nuevamente la mayoría de estos viejitos cobrarían una autentica pensión de hambre, eso si, los que cobraran, si estuviese mandando la cuarta); de nada vale recordarles que un buen sector de los viejitos que hoy cobran lo hacen porque este gobierno, del que tanto denigran, subvenciono una gran parte de las cotizaciones que tenían faltantes este muy nutrido grupo de compatriotas; de nada vale recordarles que campesinos, pescadores, amas de casa y afines hoy en día gozan de pensión gracias a este gobierno, cosa impensable en época de la cuarta o en gobierno alguno de los precandidatos, muy democráticos ellos, de la mesa de la unidad.

Y repito, de nada vale decir todo lo anterior, ya que se cansa uno de ver en la cola de los viejitos en los bancos (mi padre cobra y muchas veces le acompaño), como hablan bolserías de nuestro gobierno, como hablan pestes de nuestra revolución, y si los viejitos son europeos, ni se diga; lo que se oye es: “este tipo es un loco”, “es un comunista”, “hay que salir de él como sea”; señores por favor, así les va a todos estos malagradecidos, no hay peor defecto que el ser ingrato.

Ahora les quiero recordar, a esa caterva de ingratos de pacotilla, las compañías de telefonía celular. Quien no se acuerda el dineral que nos costaba la bendita maquina contestadora, ya que al llamar y no caer la llamada e ir el sistema a la contestadora, ¡zas!, inmediatamente le cobraban a uno la llamada; y por si no se acuerdan rumba de ingratos, fue este gobierno el que le elimino ese negocio sucio a las empresas de telefonía celular.

Y que decir de lo que uno oye en una cola de Mercal; y vale aquí la cuña, no me pelo uno. Es increíble ver a tanta gente hablando estupideces del gobierno y haciendo toda su familia, sus vecinos y amigos, las colas de cuanto Mercal consiguen; y lo de la salud es patético. Es mas que cierto que el sistema no es perfecto, tiene serios defectos, pero señores, ¡por favor! no hay barrio en Venezuela que no tenga un medico a la vuelta de la esquina; repito, a la vuelta de la esquina; con sus defectos y problemas, es cierto, pero tienen un medico en el medio del BARRIO; y esto no solo no se veía en la cuarta, no se ve en casi ningún país del mundo; y si por casualidad ganase un majunche opositor, olvídense de “Barrio Adentro”.

Ya no me alargo más, porque los ejemplos los hay por millones; lo importante era traer el punto a colación y darle el matiz principal; ahora tocara a cada lector juzgar por su experiencia propia.

En conclusión final solo les quiero dejar una breve y sencilla reflexión. Ciertamente podemos adversar a un sistema político de gobierno, podemos querer otro rumbo para nuestra patria, pero lo que no podemos hacer es salirnos del juego democrático, olvidarnos que todos somos venezolanos, que todos somos humanos; nunca debemos de dejar de tener presente que quien gobierna lo hace gracias a una cuantiosa mayoría, y que ha sido legitimado en un muy buen número de elecciones.

No nos olvidemos que ha habido errores, y muchos por desgracia; pero han sido más los aciertos y no reconocerlo no solo es mezquino, sino que es estúpido, y así les va a los opositores que niegan hasta la existencia del puente sobre el Orinoco, y si siguen así, seguirán como opositores por los siglos de los siglos, y más aun, si no entienden que hay que oír al pueblo y lo más importante FORMAR PARTE DE EL.

Y a mis camaradas dentro del gobierno revolucionario, también le sale lo suyo. Ya es hora de acabar con la ineptitud y la irresponsabilidad; y para esto solo hay que acabar con el amiguismo, el compadrazgo, los cargos otorgados al partido, la colocación de hombres de armas en sectores que para nada dominan; el entender que ha ya 12 años de gobierno esta mas que trillado hablar de quintas columnas y no ver progreso; ya esta canson el echarle la culpa al gobierno anterior, ya que eso a estas alturas del juego no se lo come nadie; y lo que es peor, ya basta de llamarse socialistas y parecerse tanto a los capitalistas que uno ya es incapaz de reconocerlos.

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