Es fácil para los que viven la vida despreocupada y tan campante, en un momento determinado tomar una decisión de envergadura, que finiquite una situación, que les causen mucha satisfacción; en cambio que para los que debemos meditar y pensar muy bien las cosas que nos convienen, porque durante toda nuestra vida, hemos experimentado situaciones de mentiras, desengaño, decepción y traiciones, se nos hace un poco más difícil tomar una decisión tan alegre, porque en la decisiones que tomemos hoy, estará en juego nuestra vida del futuro, y por lo general los que somos mordido de culebra, somos cauteloso cuando nos pretenden comprometer en la travesía de cualquier aventura emocional, y estos no solo pasa con los sentimientos, ni las relaciones entre seres humanos.
Algo parecido nos sucede con los procesos políticos de cambios profundos, porque de pronto nos comprometemos con una posición ideológica, y nos aferramos a unos principios éticos y morales, estrechamente relacionados con aquella ideología, pero al mismo tiempo, asumimos el compromiso de configurar, al emisor de esas ideología, como conductor fundamental de toda esa corriente emocionales y sentimentales de contenido filosóficos y teóricos, para poder justificar nuestras acciones en base a lo que nos han hecho sentir con algún verbo encendido.
Eso es HUGO RAFAEL CHAVEZ FRIAS, una confluencia espontanea de reacciones emocionales y sentimentales que nos conllevan a tomar decisiones de tan insospechadas envergadura y sin tan siquiera tomarnos el tiempo suficiente, para desarrollar una alternativa apaciguadora de algunos arranques emocionales ideológicos y teóricos, y nos convertimos en simple ejecutores pragmáticos de emocionales sentimientos, es decir, hacemos uso del sentimientos que más nos conviene para el momentos; y en esos momentos, solo el sentimiento revolucionario, convoca a muchos para ejecutar las acciones a la que nos invita HUGO RAFAEL CHAVEZ, ahora bien, los CHAVISTAS tenemos otros sentimientos, porque para los CHAVISTAS, el interés no son las emociones teóricas, ni las ideológicas, sino mas bien, el bienestar, la vida y la salud del ser que provoca y causa todas esas marejadas de emociones sentimentales.
Pero para decir este montón de palabras raras que dije en los párrafos anteriores y se entienda mucho mejor, voy a expresarlo en palabras mucho mas criollas así como lo diría mi panita Pedro Luis Tovar:
“no importa que pollo pille porque gallina no tiene teta” y “zamuro no se lo come porque no tiene manteca”
Es decir, “sarna con gusto no pica y si pica no mortifica”
¡VIVA CHAVEZ! no joda
cabacote@gmail.com