I.
Sidor brilló hasta 1980. Los gobiernos de la “IV Republica” desarrollaron el Gigante Siderúrgico Estatal concebido por Pérez Jiménez: acerías; funderías; grandes y diversos laminadores para perfiles IPN (300, 500, 800 y 1100), tubos sin costura, ángulos, hoja lata, alambrones y cabillas; Trefiladores; grandes sistemas para la autonomía con plantas (eléctricas, de agua, de cal, de oxigeno, de comidas), 24 comedores industriales, biblioteca, puerto fluvial, ferrocarril, complejo de talleres centrales, Centro de entrenamiento “Otto Rivero”, Teatro, campos deportivos, simposios de planta y una nomina de 18 mil trabajadores
Sidor se posicionó en la producción, los saberes y la cultura del mundo siderúrgico. “Sidor Somos Todos” y “Sidor es una escuela” están en el alma de Venezuela.
En los ’80 comienza a nublarse el futuro de SIDOR. El capitalismo mundial viró hacia la privatización. Sidor fue incluida en la agenda perversa del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
El capitalismo activó sus lacayos (gobiernos de turno, Fedecamaras y UCAB-Boys): Maritza Izaguirre condujo el FMI-BID capitulo Venezuela. El gobierno aplicó la reconversión industrial y liquidó 3 mil trabajadores. En 1994 se dictó la Ley de Privatización y se creó la Oficina para la Privatización de Sidor dirigida por Alfredo Rivas.
Todo se articuló para entregar a Sidor. Gerentes maulas, hoy renombrados profesores en la UCAB, la hipotecaron ante la banca internacional, la colocaron en cifras negativas y colapsaron el sistema productivo. Causa R desmovilizó a Sutiss. Se aplicó la ISO 9000 y solo un 18 % del complejo pasó “la prueba” el resto quedó sin valor comercial. Petkoff dijo “Sidor regalada está cara”. La evaluadora capitalista Salomón Brothers (causante del desastre financiero mundial de 2010) le puso precio de remate. En el Data Room solo se “presentaron” tres ofertas (Amazonia, Aceros del Orinoco S.A (?), e Ispat Sidven). Como se esperaba, “gano” el consorcio Amazonia. Alfredo Rivas fue el presidente de Sidor que firmó la venta.
II
La segunda época fue una década de pesadilla, políticas perversas y jugadas maestras. 10 mil trabajadores fueron echados a la calle con algo de dinero, sin seguridad social, ni evaluación médica, los hicieron firmar un “mutuo acuerdo”. Nació la tercerización y la precarización del trabajo.
En el 2000, Maritza Izaguirre, Ministra de Finanzas (1998-99), es nombrada Presidenta de Sidor, eso explica lo ocurrido cuando a Ternium le tocó pagar la primera cuota (2000) que pidió refinanciamiento y el gobierno se lo dio sin resistirse, igual que lo ocurrido en el segundo refinanciamiento de la deuda.
Ternium recibía hierro de ferrominera, a crédito y con 60 % de descuento.
El cuerpo directivo y gerencial que hundió a Sidor, se jubilo con sueldos astronómicos y pasó a la UCAB-Guayana, eso explica porque Sidor hizo grandes aportes y convenios con ese campus universitario.
Ternium inventó los excedentes de caja para “raspar la olla” y trimestralmente sacaba 70% del dinero.
En 2005 llegó Víctor Álvarez a MIBAM, entregó las acciones Clase “B” y los excedentes de caja, a la clase trabajadora. Comenzó a aclararse la situación.
Se cierra con el Decreto de nacionalización de 2008.
III.
En la última época, iniciada en 2008, el gobierno socialista asumió la conducción de Sidor por: la seguridad de la Patria, la dignidad de los trabajadores, la inclusión de los esclavos (tercerizados), la homologación de los jubilados y pensionados, la producción para hacer viviendas y no para hacer negocios.
Solo está pendiente que el Estado compre las 6.349.447 acciones Clase “B” y haga Justicia Social, cuestión que damos como un hecho para las próximas horas.
¡Sidor Somos Todos y Todas!