Aunque no lleve su apellido (mi abuela lo quiso así) soy nieto de un emigrante sirio y por eso me duele ver la grave situación por la que está pasando esta tierra que ha sufrido a lo largo de su historia varias invasiones por parte de los imperios (romano, otomano, británico y francés), Ahora el imperio más cruel y asesino que haya existido en este mundo, quiere apoderarse de la tierra donde nació mi abuelo. Ellos, los que han llenado al planeta de hambre, de miseria y de millones de cadáveres, quieren apoderarse de la capital del Islam . Ellos, los que acaparan todas las riquezas del planeta, quieren adueñarse de una civilización que tiene más de 10.000 años. Ellos, los amos de las guerras y del infierno, quieren dividir en pedacitos la patria de mi abuelo, tal como hicieron con Yugoslavia
Y todo esto está sucediendo bajo una total indiferencia de cientos
de países, a los cuales solo les importa lo que sucede dentro de sus
fronteras. A todos ellos, les importa un carajo, lo que le pueda pasar
al pueblo sirio y a su tierra. Por esta indiferencia, es que seguimos
siendo habitantes de un mundo globalizado por el egoísmo y el individualismo.
Lo único que nos importa es sobre vivir a como de lugar, sin importarnos
lo que le pase nuestro vecino y a todos los vecinos de esta tierra.
Por eso es que el capitalismo imperial gobernará en este planeta por
los siglos de los siglos y por que han hecho muy bien su trabajo, a
lo largo de estos doscientos años. Doscientos años de alienación
total sobre las mentes de todos nosotros. Nos enseñaron a, a mentir,
a robar, a matar, y sobre todo a consumir. Nos inculcaron a temprana
edad, que lo primordial en la vida es subir en el escalafón de la sociedad
a costa de lo que sea. No importa si para conseguirlo tenga que matar
a tu propia madre o padre.
¿Cuántas personas en este planeta, pueden decir que están libres
de todos estos males capitalistas? ¿Cuántas en Venezuela? Estoy seguro
que muy pocas. El imperio yanqui, el gran depredador de este mundo,
a hecho de el lo que quiera, por que se apropiaron de nuestra mentes
y por eso somos incapaces de revelarnos a nivel mundial contra esa tiranía
global. Por eso dejamos que masacre a más de un millón de ciudadanos
Iraquíes. Por eso es que permitimos la terrible matanza que están
cometiendo con el pueblo Afgano. Por eso es que están cometiendo un
holocausto contra el heroico pueblo de Palestina y por eso es quieren
apoderarse de Siria.
Todos somos culpables del holocausto mundial que está cometiendo el
capitalismo imperialista contra el planeta y sus habitantes. Pero más
culpables que todos nosotros, son los infelices gobernantes de ciertos
países que no hacen absolutamente nada para tratar de acabar con esta
situación. Tienen infinidades de organizaciones creadas por ellos,
en donde solo van a comer y a beber bien. A, hablar tonterías, a llegar
a acuerdos que nadie cumple, o aparentar unidad en la diversidad. Pero
todos, absolutamente todos, siguen amarrados al sistema del imperialismo
capitalista de una o de otra forma. Ninguno se atreve (salvo el palabrerío
inorgánico de unos y amenazas de otros) a hacer algo contundente que
permita que los imperialistas bajen poco a poco la guardia. No son capaces
de hacerlo ni siquiera en forma conjunta, el miedo les aprieta los testículos.
Por eso es el título de este artículo: ¿Quien llorará por ti, Siria
mía? ¿A quien le saldrá una lagrima, cuando las bombas empiecen a
caer sobre ti? ¿Quien sentirá un poco de vergüenza, cuando vea a
miles y miles de niños, niñas, hombres y mujeres descuartizados bajo
los escombros de edificios? Seguramente que nadie, solo tus habitantes,
llorarán por ti Siria mía mía. Solo ellos son capaces de impedir
que el capital imperial se salga con las suyas. Solo ellos, con el mismo
valor conque han luchado contra todos los imperios, lograran echar de
tu tierra, a los mercenarios de todas las nacionalidades y a los traidores
que reciben ordenes imperiales.
Quiera Alá, que los rusos y los chinos, no traicionen la valentía
del pueblo sirio, por que estoy seguro, que de hacerlo, ellos tampoco
llorarán por ti Siria mía.